SUMARÍA UN TOTAL DE 60 AÑOS DE VIDA ÚTIL

El Gobierno podría reabrir Garoña hasta 2031

La central nuclear de Garoña podría volver a abrir sus instalaciones y prolongar su vida 17 años más. Iberdrola y Endesa, propietarias a partes iguales de la planta, solicitaron ante Industria la renovación del permiso hasta 2031. La central, que lleva sin operar desde diciembre de 2012 por motivos económicos, podría alargar su vida hasta los 60 años.

El Consejo de Administración de Nuclenor ha acordado pedir la renovación de la autorización de explotación de la central nuclear de Santa María de Garoña hasta 2031, una fecha con la que la planta atómica burgalesa se situaría en los 60 años de edad.

La decisión se ha tomado en la reunión extraordinaria del Consejo de Administración, del que forman parte al 50% Iberdrola y Endesa.

La decisión se basa en lo dispuesto en el apartado 1 del artículo 28 del Reglamento sobre Instalaciones Nucleares y Radiactivas, modificado mediante Real Decreto 102/2014, del 21 de febrero, para la gestión responsable y segura del combustible nuclear gastado y los residuos radiactivos.

El titular de Garoña disponía hasta el 6 de julio próximo para pedir dicha renovación y ha acordado pedir al departamento que dirige José Manuel Soria un permiso que finalizaría el 2 de marzo de 2031, fecha en la que se cumplirían 60 años de explotación de la planta atómica.

La empresa considera que un marco temporal de explotación "de estas características es necesario para hacer viable el proyecto y proporcionaría la estabilidad y certidumbre adecuada para acometer las inversiones precisas".

La solicitud va acompañada de la documentación que acredita el cumplimiento de los requisitos exigidos para la renovación de la autorización de explotación, tal como figuraba en la última solicitud presentada.

El titular añade que la documentación incluida "demuestra" que se dispone de un adecuado control del comportamiento de las estructuras y equipos de la central y permite asegurar su capacidad para realizar las funciones de seguridad a largo plazo.

Asimismo, incluye el programa de inversiones y modificaciones de diseño asociadas a las pruebas de resistencia y las Instrucciones Técnicas Complementarias del Consejo de Seguridad Nuclear.

Al mismo tiempo, en un comunicado, Nuclenor "se compromete" a desarrollar --antes de cargar combustible en el reactor de la central-- las modificaciones de diseño que fueron requeridas con anterioridad por el CSN en su informe Ministerio, sobre las modificaciones sobre el aislamiento de contención, la independencia de sistemas eléctricos, protección contra incendios y nuevo sistema de tratamiento de gases de reserva (SBGT).

 

laSexta/ Noticias/ España