Ironía 'made in Moncloa'

El Gobierno va con todo frente a Aldama y tira de argumentario, desmentidos y una querella para tumbar su declaración

El contexto Tras las incendiarias acusaciones en sede judicial, desde Moncloa mantienen el argumentario de no ofrecer ninguna credibilidad al empresario imputado.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una imagen de archivo.laSexta

El Gobierno va con todo contra el empresario Víctor de Aldama. De hecho, ya tienen preparada una querella por injurias y calumnias contra el comisionista después de que este jueves declarase de forma voluntaria en la Audiencia Nacional y señalase hasta seis miembros y exmiembros del Ejecutivo de Pedro Sánchez. Tras las incendiarias acusaciones de Aldama, desde Moncloa mantienen el mismo discurso: ninguna credibilidad, comparaciones con el 'Pequeño Nicolás' y hasta ironías respecto a la colaboración con servicios de inteligencia como la CIA que el empresario asegura haber mantenido.

En el escrito, ya registrado durante la tarde de este viernes, figuran como denunciantes el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la vicepresidenta María Jesús Montero y su jefe de gabinete, Carlos Moreno; el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres; el President de la Generalitat de Catalunya y exministro de Sanidad, Salvador Illa; y Santos Cerdán, secretario de organización del PSOE. Sin olvidar, a la esposa del presidente, Begoña Gómez.

Desde Moncloa argumentan que Gómez, investigada por hasta cuatro delitos -apropiación indebida, intrusismo profesional, corrupción en los negocios y tráfico de influencias- en la causa que el juez Peinado instruye contra ella, aparece como firmante por ser militante del PSOE. Pero también por haber sido aludida por Aldama cuando en su declaración de este jueves aseguró que había mantenido una reunión con ella y la exministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, sobre la España Vaciada.

No obstante, este escrito todavía no cuenta con la forma de querella. Si no que, de momento, lo que han presentado corresponde a un acto de conciliación. Es decir, el Gobierno y los socialistas dan la oportunidad al comisionista de que se retracte de lo dicho ante el juez Ismael Moreno, instructor del 'caso Koldo'. En el caso de que no lo haga, sí se procederá a interponer una querella por injurias y calumnias.

El argumentario del Gobierno

Tras su primer encuentro con los periodistas que le aguardaban a su salida de Soto del Real este jueves por la noche, el comisionista ha estado más suave en las formas con aquellos que le esperaban en la puerta de su casa a primera hora de este viernes. Si bien no ha dejado atrás su tono retador, al asegurar que "tiene pruebas".

Después de admitir encontrarse "fatal" y preguntado sobre su impresión ante el calificativo de "personaje" que le dedicó Sánchez ha dicho "que el presidente siga diciendo lo que quiera decir", porque él, insiste, tiene pruebas: "Si no, no lo diría". Unas pruebas que la Fiscalía Anticorrupción cree que pudieron ser intervenidas en los registros, aunque admiten que a día de hoy no les consta que de Aldama vaya a aportarlas.

Lo que está claro es que su declaración ante el juez Moreno fue explosiva, pues no se quedó solo en el exministro de Transportes, José Luis Ábalos, y su exasesor Koldo García. El comisionista intentó manchar a otros seis miembros o ex miembros del Gobierno de Pedro Sánchez, ante lo que la respuesta ha sido unánime y los términos utilizados muy similares.

Uno de los primeros en pronunciarse durante la mañana de ese intenso jueves fue Santos Cerdán, quien aseguró que el empresario "no tiene ninguna credibilidad". Horas después y sacado adelante en el Congreso de los Diputados el nuevo paquete fiscal, Sánchez dijo que daría el "crédito que merece" de Aldama: "ninguno". Montero, por su parte, se limitó a negar haber tenido ninguna reunión "en su vida" con el empresario.

Más allá de negar cualquier vestigio de verdad en las palabras del que fuera presidente del Zamora CF, los ministros se sirven de otras cuestiones como sus semejanzas al mítico 'Pequeño Nicolás' o a la hora de ironizar quitando importancia a que de Aldama haya asegurado haber colaborado con servicios secretos como la CIA o el MI6. Eso sí, durante la tarde de este viernes se ha confirmado que fue informante de la Guardia Civil, así como que recibió una condecoración por ello.

Bolaños ha sido el encargado de recordar a la ficticia organización que dirigían los personajes de ficción Mortadelo y Filemón: "Este señor ha dicho ser colaborador del MI6 y de la CIA, le ha faltado decir ser agente de la TIA". Ingenio que ha recogido y del que también se ha servido su compañero de filas, Ángel Víctor Torres.

A su vez, el ministro de Política Territorial ha recordado la figura del 'Pequeño Nicolás', aunque asegura parafraseando a algunos medios: "Fue una comparecencia grotesca. Alguno de los medios ha hablado de un nuevo 'Pequeño Nicolás'". También la vicepresidenta ha mencionado a aquel personaje, que ya cuenta con un documental propio.

Aldama ataca, Sánchez se defiende

Además, "personaje" fue uno de los calificativos que usó el presidente del Gobierno para referirse al empresarios. Y es que en su declaración también puso en su punto de mira a Sánchez, al asegurar que su relación fue más cercana de lo que el propio socialista ha reconocido hasta ahora. Algo que provocó el enfado de Aldama que calificó a Sánchez como un "mitómano" que "tiene alzhéimer".

De hecho, en una derivada de "crédito, ninguno", Sánchez aseguró que las afirmaciones del empresario no eran más que "menuda inventada": "Poco más y yo estaba esperando a que llegara este señor para hacer el mitin de La Latina", aseguró. No obstante, Aldama respondió sosteniendo que "las fotos que se hace con cualquiera se las hace en la calle, no en zonas privadas", e incluso amenazando: "Como tantas pruebas quiere, que no se preocupe el señor Sánchez que va a tener pruebas de todo lo que se ha dicho