La Guardia Civil no encuentra mensajes en el teléfono del fiscal general que le relacionen con la filtración del novio de Ayuso

Nuevos detalles sobre la filtración del correo electrónico de la defensa del novio de Isabel Díaz Ayuso en el que proponía un acuerdo de conformidad a la Fiscalía tras admitir un fraude fiscal por el que había sido denunciado. La Guardia Civil ha comunicado este miércoles al Tribunal Supremo que después de realizar un análisis de los dispositivos incautados durante el registro en el depacho del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, se han encontrado"cero mensajes pertenecientes a cualquier tipo de aplicación de mensajería instantánea entre el 8 y el 14 de marzo" en referencia al asunto. Aunque sí las hay en su correo electrónico, aunque ninguna que probaría una revelación de secretos por la que se le investiga.

Según recoge el oficio de la Guardia Civil al que ha tenido acceso laSexta, el pasado 30 de octubre se llevaron a cabo diligencias de entrada y registro en los despachos del fiscal general y de la fiscal jefe provincial de Madrid, Pilar Rodríguez Fernández. En las mismas, se autorizó el copiado de dispositivos electrónicos o telemáticos, incluyendo los teléfonos móviles.

Respecto a la copia de seguridad del ordenador de sobremesa de García Ortiz, los investigadores han indicado que se encontraron dos correos electrónicos en su cuenta procedentes de la dirección corporativa. Ambos fechados el día 13 de marzo a las 23:45 horas con el asunto 'RV: Denuncia Maxwell Cremona'.

En el mismo se observa la cadena de correos entre el abogado del empresario Alberto González Amador, Carlos Neira, y el fiscal de Delitos Económicos, Julián Salto, del 12 de marzo, así como el reenvío a la Fiscalía Provincial de Madrid que se produjo el día 13 de ese mismo mes a las 23:44 horas. Es en ese en el que se incluye como documento adjunto la denuncia por dos supuestos delitos contra la Hacienda Pública cometidos por la empresa Maxwell Cremona, es decir, la de la pareja de Ayuso.

Además, mediante la copia que se realizó sobre los correos electrónicos de la dirección señalada, se obtuvieron un total de 45 mensajes que han resultado no presentar interés para la investigación. Y es que el informe señala que los correos fueron recibidos por García Ortiz, pero no reenviados a otra dirección.

No obstante, la Fiscalía ha reconocido que por cuestiones de seguridad y en virtud a la normativa referente a la protección de datos se hace un borrado de forma periódica sobre la información almacenada en los dispositivos electrónicos. De hecho, fuentes fiscales apuntan a laSexta que lo delicado de los mensajes que puede manejar el fiscal general obligan también a su borrado: "Imagina que pierde el móvil o que se lo roban", dicen.

Ante esta coartada que dificultaría probar la comisión de un delito de revelación de secretos por parte del jefe de los fiscales, el pseudosindicato Manos Limpias ha solicitado al Supremo que pida a Meta, Google y Facebook las copias de seguridad que podrían encontrarse en el "almacenamiento en la nube".