Abandonará Abu Dabi
Juan Carlos I podría volver a España este mismo marzo, aunque sin instalar su residencia fiscal
Según 'El Mundo', el rey emérito podría volver a España a través de Galicia y hacer su reaparición en la Regata Interclubes Ría de Pontevedra que se celebrará el 13 de marzo en Sanxenxo.
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El rey emérito podría estar a punto de volver a España: según indica 'El Mundo', que cita a amigos empresarios de Juan Carlos I, el antiguo monarca estaría planteándose la vuelta a España más de medio año después de su salida, aunque manteniendo su residencia fiscal fuera para evitar tributar en el país.
Según explica el rotativo, Juan Carlos I podría volver en menos de dos semanas y lo haría, de manera simbólica, haciendo el camino inverso al de su salida del país. El exjefe del Estado estaría valorando volar a Oporto, en Portugal, y de ahí cruzar a Galicia. El objetivo es acudir a una de las competiciones que tendrán lugar durante la Regata Interclubes Ría de Pontevedra, un deporte del que Juan Carlos I es seguidor.
De esta manera, el emérito se aseguraría una agradable acogida antes de volver a Madrid, donde no será recibido en Zarzuela. Su salida se inició, de hecho, en en Sanxenxo el pasado 3 de agosto, cuando cenó con sus allegados del Real Club Náutico de la localidad.
La vuelta, de acuerdo con las fuentes consultadas por 'El Mundo', sería temporal para evitar nuevas polémicas en torno a la institución de la Monarquía y para evadir, también, la responsabilidad fiscal. Al pasar en España menos de 183 días de un año, evitaría la tributación en el país. Esto lo conseguiría alternando sus estancias entre España, Emiratos Árabes y otros países, aprovechando sus amistades. Uno de sus anfitriones sería el empresario Pepe Fanjul, conocido como el rey dominicano del azúcar, que ha puesto a disposición del emérito sus propiedades.
El hecho de que Juan Carlos I establezca su residencia fiscal en el extranjero resolvería, en parte, su relación con Hacienda. Según las mismas fuentes, para que el rey haya podido hacer frente a su regularización de cuatro millones de euros ha recibido préstamos de empresarios amigos con cinco años para su devolución, de tal manera que el fisco no lo considere una donación. Esto evitaría futuros delitos fiscales que empañen todavía más su figura.