Debería pasar al menos 183 días al año en el país
Juan Carlos I viaja a España en el avión privado de su dentista, pero Hacienda desconoce cómo lo paga
El rey emérito ha realizado su octava visita en 2014 utilizando lujosos medios de transporte que se atribuyen a "regalos", sin que tenga que justificar sus gastos debido a su residencia fiscal en Emiratos Árabes.
Según ha publicado este lunes 'El Confidencial', el rey emérito Juan Carlos I sigue moviéndose por España sin la necesidad de justificar sus gastos o medios de transporte, gracias a su residencia fiscal en Emiratos Árabes Unidos. En esta ocasión, el monarca ha llegado a Sanxenxo (Pontevedra) en un avión privado perteneciente a su dentista, cuyo coste por hora supera los 2.500 euros.
El rey emérito, a pesar de haber abandonado el país, continúa visitándolo regularmente. Esta es su octava visita en 2024. Sin embargo, a ojos de Hacienda, Juan Carlos I no posee patrimonio en España, lo que ha suscitado interrogantes sobre el origen de sus viajes y desplazamientos en avión, por carretera y mar. Todos estos medios de transporte, según fuentes, serían "regalos" de amigos cercanos.
Carlos Cruzado, presidente del sindicato de técnicos de Hacienda (GESTHA), ha señalado que estos regalos "chocan con la información de que el emérito no tiene patrimonio fuera". Cruzado subraya que si Juan Carlos I fuera residente fiscal en España, debería dar explicaciones por este tipo de donaciones. Javier Alonso, profesor de Derecho Tributario en ICADE, ha añadido que "un residente fiscal debe tributar por las donaciones recibidas en su comunidad autónoma".
Pese a que no tiene ninguna causa judicial pendiente en España, Juan Carlos podría regresar a vivir en el país si así lo decidiera. Algunos líderes del Partido Popular, durante años, han reivindicado esta posibilidad. Cuca Gamarra, portavoz del PP, declaró "puede ir y volver a su país cuando lo considere oportuno", mientras que el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, apuntó que "es libre para venir a España".
No obstante, la falta de explicaciones sobre los regalos y el hecho de que resida en Abu Dabi han llevado a pensar que su elección no solo es personal, sino también una estrategia fiscal más favorable. Cruzado explica que "los impuestos son más leves", mientras que Alonso enfatiza que "un residente debe tributar por donaciones".
Para que Hacienda lo considere residente fiscal en España, Juan Carlos I debería pasar al menos 183 días al año en el país, una condición que no parece cumplir. A pesar de ello, su relación con España sigue siendo estrecha, con visitas frecuentes y un seguimiento constante de la prensa y la opinión pública.