UNO DE SUS PRIMOS HA HABLADO CON LASEXTA NOCHE

Los guardeses de la finca en la que Blesa se suicidó relatan que él dudó de su plan hasta en tres ocasiones

La muerte de Miguel Blesa sigue siendo un misterio para su familia, que reitera que él se encontraba bien y no dejó nota de suicidio. Los guardeses de la finca en la que se produjo elfatal desenlaceexplican que el expresidente de Caja Madrid anunció su llegada en varias ocasiones pero no fue hasta que finalmente sí lo hizo.

La familia de Blesa sigue sin explicarse su muerte. En declaraciones en exclusiva para laSextaNoche, uno de sus primos cuenta cómo lo vio por última vez, en una boda. "Sabía que tenía problemas, los problemas que salen en la tele, pero el parecía normal y tranquilo nunca, no se le notaba", declara su primo Francisco Fernández.

El exbanquero, según La Razón, habría organizado hasta tres viajes fallidos a la finca, antes del suicidio. "Era un hombre muy organizado, calculador no", añade su primo.

Llegó a Villanueva del Rey de madrugada, ligero de equipaje y con su propia escopeta, que nunca utilizaba. "Si pensaba hacer lo que fuera no quería comprometernos y se ha traído su arma", explica Fermín Gallardo, administrador de la finca en la que falleció en exbanquero.

Quienes hablaban con él a diario, aseguran que su comportamiento, era el de siempre. "Personas que hablaban decían que tenía un comportamiento normal. Haciendo planes para el verano", señala Carlos Segovia, subdirector de 'El Mundo'.

Con sus distintos frentes judiciales abiertos, Blesa recibía insultos a diario, e incluso llegó a ser agredido. "Estaba en un restaurante y un hombre se acercó, le pegó dos puñetazos y lo tumbó", explica Eduardo Inda, director de 'Ok Diario'.

Con su muerte se extingue su responsabilidad penal, pero no la civil. De la que podrían tener que hacer frente, sus herederos.

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