Algunos se saltan las normas
Madrid, el nuevo 'Las Vegas' para extranjeros europeos que viajan a la capital por la flexibilidad en las medidas
La capital recibe la visita de turistas europeos que buscan disfrutar de la gastronomía española y de la "flexibilidad de las restricciones" con respeto a sus países. Sin embargo, con el toque de queda, algunos deciden continuar la fiesta en pisos turísticos, lo que provoca la indignación de vecinos del centro de Madrid.
Madrid se ha convertido en el nuevo 'Las Vegas' para extranjeros europeos por "la flexibilidad de las restricciones en España", tal y como afirma Mélanie, francesa de vacaciones en Sevilla. Así, los franceses cambian el auténtico desierto cultural y gastronómico por unas unas tapas o unas copas, y medidas más flexibles.
En este sentido, Bertrand Canavaggio, francés de vacaciones en España, señala que en nuestro país "los bares, restaurantes y museos están abiertos, mientras que en París están cerrados". Por ello, algunos franceses que viven en España admiten que sus amigos lo visitan cada vez más: "Últimamente estoy encantado porque veo mucho más a mis amigos", cuenta Edouard Boyer, francés que vive en la capital.
Sin embargo, España no solo recibe la visita de franceses, sino también la de irlandeses, quienes reservan citas con dentistas españoles para eludir las restricciones de los viajes. "Si tenían la posibilidad de demostrar que tenían una cita con el dentista, podían salir del país, pero luego nunca se han presentado aquí", señala un profesional de una clínica dental en las Islas Canarias.
Muchos de los jóvenes turistas que vienen a Madrid lo hacen en busca de fiesta, pero con el toque de queda a las 23:00 horas, deciden seguirla en pisos turísticos. "Hay muchos extranjeros, pero también hay muchos locales que están alquilando los pisos turísticos para fiestas", denuncia Leticia, vecina del centro de Madrid. En la misma línea, Saturnino Vera, de SOS Madrid Centro, critica que "se nos exige a las familias que no nos traslademos a otros sitios, pero se hacen fiestas en edificios residenciales".
Airbnb ha informado de que han "eliminado o suspendido 800 anuncios en diciembre en España, anuncios que habían recibido quejas o infringido la política de prohibición de fiestas".
Sin embargo, muchos logran su objetivo sin sanciones y las denuncias ahora quedan en mano de los vecinos: "Vino la Policía porque los vecinos se habían quejado, pero no les abrimos la puerta, bajamos un poco el volumen y no pasó nada más; la Policía se fue", relata una joven.