La decisión de Ayuso depende de la evolución

Madrid estudia dejar abierta la comunidad en Semana Santa y permitir viajar si los datos COVID siguen mejorando

Ignacio Aguado ha dicho que el objetivo prioritario es levantar el toque de queda, ahora fijado a las 23:00 horas.

La Comunidad de Madrid está abierta a permitir la movilidad entre regiones en Semana Santa si la evolución epidemiológica continúa con la tendencia actual, según han confirmado fuentes del Gobierno regional en conversación con laSexta.com. El horizonte que se dibuja es bastante más esperanzador que el que se vivía hace unas semanas, con el pico de la tercera ola azotando la autonomía.

A menos de tres semanas de la fecha, marcada en rojo en el calendario, “la idea, en este momento, es no cerrar la Comunidad, pero hay que ver la evolución”, apostillan. La decisión final dependerá de las conclusiones que obtenga la Consejería de Sanidad tras valorar las posibilidades. “Aún está todo en estudio”, comentan.

La apertura de Madrid sería un cambio de tendencia con el resto de ejecutivos autonómicos. Por eso, el gobierno de Ayuso también está teniendo en cuenta estos parámetros. Con los festivos y un buen clima, las fuentes advierten de lo que podría suceder si se el resto de comunidades prefiere confinar perimetralmente: una saturación. Mejor, a sus ojos, que se pueda viajar en toda España.

Según ha indicado la presidenta regional en una rueda de prensa, el Ejecutivo madrileño va a trabajar conjugar salud y economía e intentar encontrar un equilibrio.

"Solo me importa lo que digan mis expertos. Cierto es que los festivos influyen y la movilidad, pero tenemos que ver día a día los datos y tomaremos las mejores medidas", ha asegurado.

El vicepresidente, Ignacio Aguado, ha dicho que lo primero, en cualquier caso, es levantar el toque de queda, "ese es el primer objetivo a estudiar. Luego vendrá la Semana Santa. Mientras tanto, tenemos que seguir reduciendo la curva de contagios".

Almeida también quiere abrir

Así, la balanza está inclinada, de momento, por la luz verde. La voluntad del Ministerio, en cambio, es otra: tratar de organizar a los gobiernos autonómicos y que efectivamente exista un plan conjunto a nivel estatal para poder evitar la disonancia entre territorios, como finalmente sucedió en Navidad. Sin embargo y por ahora, el Consejo Interterritorial no ha llegado a ningún acuerdo de calado.

En base a los últimos datos, a 1 de marzo, la incidencia acumulada a 14 días se sitúa en 284 casos por cada 100.000 habitantes en la Comunidad de Madrid. La media nacional está en 175, y la región gobernada por Ayuso es la segunda con mayor incidencia, sólo superada por Melilla -367-. Le siguen, de cerca, Ceuta -264- y País Vasco -228-. Se considera situación de riesgo extremo cuando la incidencia supera los 250 casos.

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha pedido este martes, por su parte, que “se mantenga abierta” la comunidad en esta ocasión y se rompa con la tónica de los anteriores puentes y festivos. La idea de las autoridades es poder dar un respiro, viendo cómo se ha actuado en los últimos festivos. Eso sí, siempre con medidas especiales y atendiendo a la evolución.

Además, Ayuso ha respondido al alcalde, asegurando que no va a comentar su deseo de mantener abierta la comunidad: "No voy a entrar a valorar las palabras de hoy de Almeida sobre el cierre perimetral. Ya hablaremos él y yo sobre el tema cuando proceda", ha subrayado.

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