CORROBORAN QUE LA INFORMACIÓN FUE ELIMINADA EL 3 DE JULIO
Los peritos concluyen que no se puede recuperar “nada" del disco duro de Bárcenas
El juez Ruz ha confirmado que no puede contar con una de las pruebas del caso Bárcenas: los peritos informáticos no han logrado recuperar datos del disco duro del ordenador con el que trabajaba el extesorero en Génova, porque en él no había nada.
Un informe de expertos informáticos de la Policía Nacional concluye que el disco duro que contenía uno de los ordenadores aportados por el PP al juez Pablo Ruz y que usó su extesorero Luis Bárcenas en la sede del partido fue formateado el 3 de julio, seis días después de que ingresara en prisión.
En el informe se analiza el disco duro de marca Seagate que contenía el ordenador portátil Apple MacBook Pro, que usó Bárcenas cuando trabajaba en la formación política. Según el informe, el sistema operativo del ordenador, que salió al mercado el 4 de junio de 2013, se instaló el día 3 de julio de 2013 a las 21.00 horas.
En el disco solo aparece un usuario, cuyas carpetas personales estaban vacías "y del que no consta en los registros del sistema otra actividad diferente a la propia instalación del sistema operativo", detalla el informe en sus conclusiones. Además, los peritos explican que los intentos de recuperar los datos del disco usando una aplicación específica para ello no han dado sus frutos.
Los peritos ya avanzaron al juez en su declaración el 10 de septiembre que el ordenador había sido formateado esa fecha, seis días después de que el extesorero del PP ingresara en la cárcel de Soto del Real (Madrid) por el caso Gürtel y doce días antes de que cambiara su estrategia de defensa y reconociera ante el juez la supuesta contabilidad B en el partido.
Durante el volcado de la información de los dos ordenadores llevado a cabo el pasado agosto en la Audiencia Nacional, se averiguó que uno de los ordenadores (el más antiguo, marca Toshiba) no tenía disco duro en su interior, mientras que el otro (el Apple) sí lo contenía pero no era el original.
El PP ya avisó en un escrito dirigido al juzgado en agosto, cuando entregó los ordenadores, de que sus memorias fueron borradas en cumplimiento de un protocolo que aplica el partido acorde con la Ley de Protección de Datos, que establece que cuando un trabajador que tiene acceso a información delicada abandona la formación, las memorias de sus ordenadores se destruyen.
El partido explicaba que lo hizo después de que en abril un juzgado de Madrid archivara una denuncia del extesorero en la que consideraba que la formación le había robado los dispositivos al no dejarle recogerlos de la sede, aunque el PP no concretó en su escrito la fecha exacta en que lo hizo.