Tras el aniversario de la Constitución
El presidente del Tribunal Constitucional ve "razonable" reformar la Constitución
Pedro González-Trevijano señala que se debe establecer una "hoja de ruta" que consiste en "abrir la reforma en un momento de distensión política".
El presidente del Tribunal Constitucional, Pedro González-Trevijano, ha señalado este martes que cuando se insta a un proceso de reforma constitucional se debe establecer una "hoja de ruta" que consiste en "abrir la reforma en un momento de distensión política" y en saber "qué se reforma, por qué y de acuerdo con qué criterios".
Así se ha expresado en una entrevista en la Cadena Ser al ser preguntado sobre una eventual reforma de la Carta Magna que, a su juicio, es una medida "en principio válida y razonable".
"Por un lado, las Constituciones tienen vocación de permanencia, pero simultáneamente la generaciones modernas tienen derecho a organizar su vida jurídico política de acuerdo con las exigencias de los nuevos tiempos", ha argumentado.
Preguntado sobre si sería posible acometerla en este momento, ha opinado que "cuando uno se encuentra en situaciones enconadas, repentinamente, el contexto cambia". "En la historia hay ventanas abierta en las que es posible el acuerdo y el compromiso", ha añadido.
Si bien ha insistido en que la clave se encuentra en mantener los principios que definieron la Constitución, el presidente del Constitucional ha mencionado algunas "reformas puntuales" que se deberían abordar como la organización territorial del Estado o una mención explicita al proceso de construcción europea y Unión Europea. También ha hecho referencia a la eliminación de la discriminación por razón de sexo en la sucesión a la Jefatura del Estado.
Por otra parte, Trevijano ha pedido a las formaciones que tienen en su mano renovar los órganos constitucionales que "están obligados a tratar de hacer el esfuerzo de ponerse en común" y ha hecho hincapié en que deben renovarse "en tiempo y forma".
Por último, sobre el magistrado Enrique Arnaldo, ha afirmado que se puede haber sido miembro de un partido político, solicitar la baja y llegar al Tribunal Constitucional. "¿Por qué no?", se ha preguntado, a la par que ha recalcado que si se cumplen los requisitos que se establecen en la Constitución no tiene "ninguna duda" de que Arnaldo, "como los demás, ejercerá sus funciones con imparcialidad e independencia".