En una carta abierta
Puigdemont denuncia una persecución judicial: "Si hubiéramos hecho presidente a Feijóo, esto no pasaría"
Así lo ha asegurado el expresident catalán en una carta que ha remitido a los eurodiputados. Horas antes, la Eurocámara apuntaba a los lazos de Puigdemont con Moscú y pedía a España una investigación interna.
El expresidente catalán y eurodiputado de JxCAT Carles Puigdemont ha asegurado este jueves que si hubiera permitido la investidura del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, como presidente del Gobierno, en lugar de la de Pedro Sánchez, no se le estaría investigando por un delito de terrorismo ni se abriría la puerta a hacerlo por el de alta traición. En una carta de tres páginas en catalán que ha enviado al resto de eurodiputados el mismo día en que la Eurocámara ha pedido a España que investigue los nexos entre Rusia, el independentismo catalán y en concreto Puigdemont, el expresidente catalán ha dicho que "si hubiéramos hecho presidente a Feijóo, todo esto no pasaría".
Puigdemont ha afirmado que el juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón, que investiga la causa contra Tsunami Democràtic, decidió investigarle por terrorismo el mismo día en que, a priori, se iba a dar a conocer el pacto entre JxCAT y el PSOE para investir a Sánchez. "Que el juez decidiera despertar casi el mismo día en el que se tenía que anunciar el acuerdo político de investidura no es una casualidad, porque desde hace años se sabe -y lamentablemente se acepta como cosa inevitable- que algunos magistrados coordinan las agendas judiciales con las políticas", ha señalado el expresidente.
Puigdemont también ha asegurado que Joaquín Aguirre, el juez titular del caso Volhov que se investiga en el juzgado de instrucción 1 de Barcelona, "conocido por su animadversión al independentismo, decidió reactivar un caso que ya había archivado". El expresidente catalán ha afirmado que "esta estrategia ha arrastrado también al Parlamento Europeo", donde "el PP español ha conseguido imponer sus estándares a la mayoría conservadora europea y es una noticia funesta para la Unión". Puigdemont ha añadido que "la investidura de Pedro Sánchez y la tramitación de la ley de Amnistía desencadenaron una dura reacción de la derecha y la ultraderecha, con manifestaciones semanales, asedio a las sedes del Partido Socialista y llamadas a la desobediencia".
"Sólo se dan cuenta de que soy un terrorista y un traidor a la patria precisamente hacer unas semanas, coincidiendo con uno de los acuerdos políticos más relevantes que se han producido desde la muerte de Franco", señala Puigdemont. El juez del caso Voloh no está investigando al expresidente por un posible delito de alta traición, pero cree que hay indicios de que Rusia estaba dispuesta a apoyar "económica y militarmente" la independencia de Cataluña para “desestabilizar la Unión Europea” y que Puigdemont y miembros de su entorno mantuvieron “estrechas relaciones personales” con políticos de extrema derecha alemana e italiana y con Rusia.
"Toda esta reacción no se produjo por generación espontánea", afirma Puigdemont, que apunta que "cuatro días antes de que el juez García-Castellón" decidiera investigarle como terrorista "el expresidente (del Gobierno) español José María Aznar hacía un pronunciamiento en el que la instigaba sin complejos". Y ha recordado las palabras de Aznar, en las que dijo que "quien pueda hablar que hable, quien pueda hacer que haga, quien se pueda mover que se mueva. Cada uno en su responsabilidad debe ser consciente de la situación en la que nos encontramos". Según Puigdemont, "la construcción del caso sobre la llamada trama rusa guarda una gran similitud con la teoría de la conspiración en los atentados del 11-M de Madrid", en los que "durante años (...) se alimentó la idea de que los atentados habían sido obra de ETA".
El expresidente catalán asegura que "no ha existido ninguna trama rusa ni ninguna connivencia con el régimen (del presidente ruso, Vladímir) Putin. "Nadie encontrará en mis decisiones, en mis declaraciones, libros y conferencias, votaciones, nada que se pueda interpretar en este sentido", ha dicho Puigdemont, que ha asegurado "desconocer completamente cual es la estrategia rusa en relación con el conflicto histórico que Cataluña tiene con España". "Ojalá el Parlamento Europeo y España puedan hacer una investigación independiente de verdad, con relatores que no tengan intereses partidistas ni nacionales", ha señalado.