Incidentes aislados
Condena rotunda de casi todos los partidos a los disturbios provocados por grupos violentos en Barcelona tras la manifestación en defensa de Hasél
En los disturbios de este sábado los agentes han detenido a 14 de personas, entre ellos dos menores. Además, los servicios de emergencia han atendido a cinco personas por los altercados que volvieron a llenar de ruido la Ciudad Condal.
Las consecuencias de una nueva noche de disturbios en Barcelona vuelven a ser evidentes: restos de los incendios en las calles y cajeros de algunas sucursales bancarias totalmente inservibles. También parte del mobiliario urbano arrancado, y escaparates de distintos comercios destrozados a golpe de piedras y otros objetos. En las últimas horas 14 personas fueron detenidas en los incidentes registrados en Barcelona, en los que resultaron heridos leves seis agentes de los Mossos, según el último balance hecho este domingo por la policía catalana y los servicios de emergencias. Fuentes del Sistema de Emergencias Médicas (SEM), por su parte, han informado de que durante los disturbios atendieron a cinco personas, de las que una fue trasladada a un centro hospitalario en estado menos grave y cuatro fueron atendidas en el lugar de los hechos y pidieron el alta voluntaria.
Los incidentes se produjeron después de que unas 4.000 personas, según la Guardia Urbana, se manifestasen en la capital catalana para pedir la libertad del rapero Pablo Hasel y para reivindicar la regulación de los precios del alquiler, la derogación de la ley mordaza, de los antidisturbios de los Mossos, la reforma laboral o la excarcelación de los líderes del "procés", entre otras demandas. La protesta había sido convocada por fuerzas como Arran, la CUP, Endavant, el Sindicat d'Estudiants dels Països Catalans (SEPC) y los CDR, y la han apoyado, entre otros, el Sindicat de Llogaters y Podem Catalunya.
En los disturbios registrados al acabar la manifestación se intentó quemar una furgoneta de la Guardia Urbana con un agente dentro, el incendio del cuartel de este cuerpo en las Rambla, y se volvieron a saquear tiendas, vandalizar oficinas bancarias y ocasionar daños en un hotel, entre otros daños. Fuentes de los Mossos han informado de que de las 14 personas detenidas en los incidentes, dos son menores. Tras los arrestos de anoche, son 137 las personas detenidas en actos vandálicos en Cataluña desde el martes 16 de febrero, día en que fue detenido y encarcelado el rapero Pablo Hasél por una condena por enaltecimiento del terrorismo.
Uno de los detenidos está vinculado presuntamente al fuego que afectó a un vehículo de la Guardia Urbana. Los Mossos, en diversos filtros habilitados anoche durante los disturbios, encontraron a personas que querían meter en las zonas de los disturbios piedras, aguarrás, material pirotécnico y diversos botes de pintura. La policía catalana constató que los incidentes los desarrollaron grupos organizados violentos, de entre 15 y 20 personas encapuchadas, que utilizaban material pirotécnico y gasolina para quemar entidades bancarias, establecimientos y un vehículo de la Urbana.
Los agentes también detectaron que, mientras actuaban esos grupos, otros saqueaban comercios y, en otro nivel, un tercer colectivo de personas levantaba barricadas para impedir la acción policial. Entre las personas que reclamaron ayuda a los Mossos por los incidentes se encuentra un equipo del SEM que se vio rodeado e increpado por un grupo de violentos en el cruce de las calles Hospital con Bernardí Martorell. A pesar de la violencia de las acciones, los Mossos no llegaron a utilizar en ningún momento pelotas de foam ni realizaron cargas contra los alborotadores. Los Bomberos, por su parte, actuaron para apagar 14 contenedores incendiados y cuatro cajeros automáticos.
Unas reivindicaciones más allá de la liberación del rapero que se dieron también en Vic, en la provincia de Barcelona, donde recorrieron la localidad e hicieron una parada frente a la Comisaría de Policía. En Sabadell se dio un incidente aislando: un grupo de manifestantes golpeó un cajero automático sin que se produjeran incidentes más notorios. Horas antes, estas protestas también habían llegado a las calles de Girona. Allí, unas 500 personas marcharon por el centro de la ciudad exigiendo que el rapero salierade prisión. Así ha sido una nueva jornada de manifestaciones que ha empezado a primera hora del día, cuando un grupo de unos 60 manifestantes ha cortado la AP7 en su paso por la ciudad y que minutos más tarde los Mossos han desalojado.
Condena a los hechos y críticas ente partidos
Desde el terreno político se ha dado una condena absoluta a la violencia. Rotunda y sin matices ha sido la de Salvador Illa, candidato del PSC a la Generalitat de Cataluña. Ha asegurado que hay que actuar con contundencia para frenar los disturbios: "La tibieza de algunas formaciones políticas no solo no ayuda a acabar con eso, sino que ayuda a enquistarlo, y ya no digo aquellos que convocan estos actos".
Se ha sumado así al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que calificaba estos hechos de "inaceptables actos de vandalismo". No obstante, desde el PP han acusado a Sánchez y al ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, de inacción ante la situación vivida en la Ciudad Condal. "¿Dónde está Pedro Sánchez y por qué no hace nada? Lo que pasó fue terrorismo callejero", ha denunciado Pablo Montesinos, vicesecretario de Comunicación del PP.
Por su parte, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha mostrado su preocupación y la semana que viene se reunirá con el president en funciones, Pere Aragonès. "Una reunión operativa para intentar mejorar los dispositivos", ha dicho la dirigente del consistorio barcelonés. En este sentido, Aragonés ha afirmado que estos saqueos no responden a la libertad de expresión ni de manifestación, y desde el Sindicato de Mossos han atribuido esta concentración a la CUP, lanzando una clara advertencia a ERC y JxCat ante el plan de de modificar el órden público en Cataluña.
"En esta manifestación convocada por la CUP, entre otros, se ve claro qué modelo de orden público proponen. Diputados y diputadas, ¿el cambio empieza por intentar matar agentes de Policía quemándonos?", se ha preguntado el SICME a través de un mensaje en Twitter en el que ha citado a Juts per Catalunya y a Esquerra. Mientras tanto, Arran, organización juvenil de la izquierda independentista, tuiteaba la foto del furgón en llamas con este contundente mensaje: "Hasta que caigan todos aquellos responsables de nuestro malestar: los que nos dejan sin casa, sin trabajo, nos reprimen y nos sacan toda perspectiva de futuro".
La CUP representa la 'batasunización' de la política catalana"
El conseller de Interior en funciones, no obstante, ha insistido en que no atenderán a la petición de la CUP de disolver la Área de Brigada Móvil (BRIMO). "Personalmente creo que eso no puede ser. Estamos viendo lo que está sucediendo en Cataluña. No me imagino que no haya una unidad, se llame Brimo, Brama o Bruma, lo mismo da", ha expuesto Miquel Sàmper. Dolors sabater ha reconocido que poner una vida en riesgo es un límite, pero hablan de hipocresía en las condenas
"Hay un punto de hipocresía, no nos podemos escudar en la tranquilización de conciencias por la condena. Hay que abordar que realmente que el país tiene un problema gravísimo", ha expuesto la candidata de la CUP a la Generalitat en declaraciones a Catalunya Ràdio. Unas palabras de Sabater que han generado gran indignación en Ciudadanos. "La CUP representa la 'batasunización' de la política catalana", ha denunciado Carlos Carrizosa, candidato de la formación naranja. Crispación en el panorama político por unos disturbios que comenzaron hace ya 12 días.