HA DESTACADO LA INDEPENDENCIA JUDICIAL
Rajoy ve "modélico" el comportamiento del Gobierno alemán tras la libertad de Puigdemont y da por zanjado el debate
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha calificado este martes de "modélico" el comportamiento del Ejecutivo alemán que preside Angela Merkel después de que un tribunal de ese país haya dejado en libertad al expresidente catalán Carles Puigdemont, ya que, según ha dicho, se trata de un asunto judicial en el que no deben entrar los gobiernos.
Así se ha pronunciado al ser preguntado si cree que en este caso se está respetando que Europa sea un espacio de confianza y respeto al Estado de Derecho, así como si el Gobierno español ha realizado alguna acción para evitar declaraciones que ponen en duda la aplicación del Estado de Derecho en España.
En una rueda de prensa en Buenos Aires con el presidente de Argentina, Mauricio Macri, Rajoy ha afirmado que las decisiones de los jueces y los tribunales "se respetan y se acatan", algo que, según ha recalcado, es "un principio básico de la democracia". Los jueces, ha proseguido, "se pueden o no equivocar", igual que lo puede hacer el poder legislativo o los ministros que componen el poder ejecutivo.
Dicho esto, ha explicado que los jueces españoles han dictado una euroorden contra Puigdemont y ha recordado que la Fiscalía alemana "apoyó" esa euroorden. Ha añadido que un juez en Alemania ha tomado una decisión "distinta" -al dejar en libertad a Puigdemont bajo fianza de 75.000 euros y descartar la rebelión- pero "todavía no es una decisión definitiva". "Nosotros respetaremos la decisión que se tome al final", ha agregado.
Dicho esto, el jefe del Ejecutivo ha subrayado que el planteamiento que ha hecho el Gobierno alemán ha sido "modélico", ya que, según ha recordado, "ha dicho que no tiene por qué entrar en un tema que no le corresponde porque eso es un asunto judicial". Por eso, ha dicho que "nadie de ningún gobierno debe entrar en hacer comentarios sobre este tema".
"Por tanto, el comportamiento del Gobierno alemán me ha parecido un comportamiento propio de una nación europea de las clásicas y de las de primera", ha proclamado el jefe del Ejecutivo para querer zanjar este asunto.
Finalmente, el jefe del Ejecutivo ha salido en defensa de Europa recordando que cuando se dieron los primeros pasos para la construcción europea la idea era "convertirla en un espacio de paz, libertad y derechos humanos", en el que la "primacía de la ley fuera un valor asumido por todos y un Estado de Derecho". "Yo soy un profundo europeísta", ha aseverado.