"Obligación moral del PP"
El PP recurre la ley de amnistía ante el Tribunal Constitucional al considerarla "injusta e inmoral"
El recurso de inconstitucionalidad del PP ya está registrado y su ponencia ha recaído en el magistrado José María Macías, que se ha pronunciado públicamente contra la ley de amnistía.
El Partido Popular ha recurrido este jueves la ley de amnistía ante el Tribunal Constitucional al considerar que la norma no solo es inconstitucional, sino también "injusta e inmoral", y que solo busca "borrar delitos que han sido cometidos para que uno se pueda mantener en el poder".
Con este argumento, la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha defendido en declaraciones facilitadas a los medios el recurso de inconstitucionalidad planteado por su partido, en el que -ha asegurado- se "plasman todas las vulneraciones e infracciones constitucionales en los que incurre".
Dicho recurso, según Gamarra, "es unaobligación moral del PP como único partido de Estado, fiel a la Constitución y a la igualdad, que queda en el arco parlamentario". Para la dirigente 'popular', la ley de amnistía es inconstitucional porque "es arbitraria", ya que su único objetivo es "conseguir el poder a cambio de la impunidad".
Los plazos del TC para decidir sobre la amnistía
Fuentes del Constitucional consultadas por laSexta han confirmado que el recurso del PP ya está registrado y que su ponencia ha correspondido al magistrado José María Macías, designado el pasado mes de junio, que se ha opuesto públicamente a la ley de amnistía.
El presidente del Tribunal tiene la intención de llevar este recurso para su admisión a trámite al pleno del día 24 de septiembre. A su vez, el Pleno del Constitucional tiene previsto empezar a estudiar ya la semana próxima la constitucionalidad de la norma a partir de la cuestión que elevó a finales de julio el Tribunal Supremo.
Así las cosas, los plazos que maneja el Constitucional para resolver el asunto de la amnistía van de seis meses a un año. Esto implicaría un marco temporal que situaría una posible vuelta -esta vez definitiva- de Carles Puigdemont a España a mediados de 2025.