SE CUMPLE UN AÑO DE LA SURREALISTA HUIDA

Salió oculto en el coche de su mujer y no se lo comunicó a algunos consellers: la intrahistoria de la huida de Puigdemont a Bélgica

Hasta que no pisó Francia, Puigdemont no avisó de que se fugaba. Sólo tres personas conocían sus planes y ni siquiera Oriol Junqueras estaba al tanto. De hecho, el lunes, con Puigdemont ya en Bruselas, él y Romeva le esperaron durante un rato en el Palau por tenían una cita.

Es la última vez que pudimos ver a Puigdemont en Cataluña fue paseando por las calles de Girona el sábado 28 de octubre de 2017. Dos días después, daba los buenos con una foto en redes sociales que supuestamente estaba hecha desde el interior del Palau. Pero por allí nadie lo ha visto.

El día avanzaba entre nerviosismo y rumores, nadie sabe dónde está Puigdemont, que en realidad ya está lejos. El día antes había salido oculto en el coche de su mujer desde su domicilio, después se cambió a un coche oficial y puso rumbo a Marsella acompañado de un escolta de su confianza y del empresario Josep Matamala. Desde allí, vuela hasta Bruselas.

Está acompañado de cinco miembros de su Govern, tres de Esquerra y dos del PdeCat, que recibieron una llamada cuando Puigdemont ya estaba en Francia. Toni Comín cuenta que recibieron "la propuesta de reunirse en Bruselas", pero este mensaje no llegó a todos, como cuenta el periodista Sergi Sol, porque Romeva "estaba esperando a las 9 de la mañana en el Palau".

Entonces se hace el silencio en el PdeCat y ERC, pero la CUP ya avisa esa misma tarde de que ellos no conocían los planes.

Un año después, Puigdemont sigue instalado en Bruselas con el mismo objetivo: internacionalizar el procés. Para ello, se presentará el Consell de la República, tal y como anunciaron Torra y Puigdemont desde la residencia Belga del expresident en Waterloo.

laSexta/ Noticias/ España