Cara a cara en el Senado

Sánchez deplora el modelo fiscal del PP ante un Feijóo que le acusa de "hipotecar" al país

El presidente y el líder de la oposición confrontan por la forma de responder a la crisis en un nuevo debate en el Senado. Un Feijóo acusa a Sánchez de endeudar a los españoles y le insta a retirar los PGE.

Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo confrontan por sus modelos anticrisis en un nuevo cara a cara en el Senado. Así, si el presidente del Gobierno ha reivindicado sus medidas económicas y deplorado la receta de rebaja de impuestos del PP, el líder de la oposición ha endurecido su tono y se ha referido a los Presupuestos como "Hipotecas Generales del Estado".

Ello, después de que Sánchez rechazara "que se establezca una suerte de disputa fiscal indiscriminada a la baja", tras las rebajas impositivas por las que apuestan varias comunidades gobernadas por los 'populares'. Así, ha pedido reiteradamente no olvidar "las lecciones de la pandemia" y ha arremetido contra los recortes en Sanidad y la política energética del PP, abogando, en cambio, por un modelo de "corresponsabilidad fiscal" donde contribuyan la banca y las energéticas, así como los más ricos.

El líder socialista -que ha resumido su plan frente a la crisis derivada de la guerra en Ucrania como "reformar, proteger y repartir las cargas"- además ha sacado pecho por el mecanismo ibérico, instando a la oposición a rectificar tras sus críticas: "Sería bueno rectificar, reconocer un error, señorías", ha deslizado, dirigiéndose a la bancada 'popular', a la que ha recordado cómo, durante el Gobierno de Rajoy, "en el país del sol, se gravó al sol".

Feijóo, por su parte, ha acusado a Sánchez de llegar al Ejecutivo "cabalgando a lomos de una mentira" y de sellar la coalición de gobierno "sobre otra mentira". "Ahora, pretende despedirse del Gobierno con otra gran falsedad: la que se denomina 'Hipotecas Generales del Estado'", ha aseverado el líder del PP, que ha reclamado a Sánchez que retire unos PGE que ha tachado de "ficticios".

En este sentido, ha asegurado que el Ejecutivo ha errado en todas sus previsiones económicas y ha lanzado un dardo a Sánchez -"un gran estadista contemporáneo europeo", ha ironizado- citando sus propias palabras: "¿Será insolvencia o mala fe?", ha planteado, utilizando los mismas términos con los que el presidente cuestionó su solvencia durante su anterior debate.

"Aterrice, señor presidente", ha espetado a Sánchez, a quien ha acusado reiteradamente de endeudar a los españoles. "La España que vamos a dejar se resume en menos riqueza y más impuestos", ha aseverado Feijóo, que además ha cuestionado las últimas previsiones electorales del CIS, en las que el PSOE aventaja a su partido.

Por su parte, en su turno de réplica, Sánchez ha reprochado a Feijóo su falta de propuestas y le ha acusado de usar "bulos" para cargar contra su Gobierno, al igual -ha dicho- que hiciera su predecesor, Pablo Casado, mientras que el dirigente 'popular' ha insistido en su contrarréplica en pedirle que retire las cuentas.

Un debate que se produce en plena negociación entre ambos partidos sobre el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), un tema que ambos políticos han dejado de lado para, en su lugar, confrontar por la forma de responder a la crisis.

Así valoran el debate PP y PSOE

Tras este nuevo cara a cara, fuentes socialistas consultadas por laSexta aseguran que Feijóo ha venido sin propuestas al debate y con un tono "fuera de lugar y perdiendo los papeles". Insisten en achacar poca solvencia y falta de proyecto al líder de la oposición, de quien dicen que su tono le delata y que ha tirado de "liberalismo ultra". A juicio de las citadas fuentes, el presidente del PP no resiste la comparación y en su intervención "todo han sido lugares comunes y chascarrillos", sin ninguna propuesta.

Por su parte, desde el Partido Popular niegan que el tono de Feijóo haya sido bronco y defienden, en cambio, que ha sido "contundente". Creen, en cambio, que Sánchez ha cambiado su tono en este debate porque en el anterior -dicen- le fue mal e inciden en el tiempo -muy superior al de su rival- con el que ha contado el presidente del Gobierno para sus intervenciones.

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