Sanitarios de primera línea sin vacuna, dosis descongeladas antes de tiempo... el "descontrol" en el plan de vacunación

Pasamos a la segunda etapa de la vacunación contra el coronavirus sin que muchos integrantes de la primera hayan sido vacunados. El orden ha sido claro: en la primer etapa iban las personas mayores en residencias y los profesionales sanitarios y en la segunda etapa el resto del personal sanitario, personas con discapacidad y mayores de 82 años.

Sin embargo, un ejemplo de que esto no se cumple es el caso de la abuela de Jenner López, de Marea de Residencias, ya que, según cuenta, la mujer "tiene 92 años, vive en una residencia y todavía no ha sido vacunada".

Madrid, sin vacunas para los sanitarios de primera línea

Madrid ya ha dicho que se ha quedado sin vacunas para los sanitarios de primera línea tras haber vacunado antes a otros colectivos. En este sentido, Rafael Rubio, del Movimiento Asambleario de Trabajadores de Sanidad denuncia que "hay trabajadores de urgencias, de las UCI, de unidades de hospitalización covid, reanimación y anestesia que no han recibido la vacuna, mientras que trabajadores de otras zonas con menos riesgo o exposición han sido vacunados".

Hay dosis que se descongelan antes de tiempo

Se denuncia el "descontrol" que hay en la vacunación, ya que hay dosis que son descongeladas antes de tiempo. Concha Herranz, médica de atención primaria, indica que "se supone que se descongelas las dosis que ya están asignadas", por lo que dice que no entiende "por qué sobran viales y por qué cuando se redistribuyen los sobrantes no se utilizan en las personas que están en esa fase".

Por este motivo, es imprescindible, tal y como defiende Diego Ayuso, del Consejo General de Enfermería, "ir abriendo los viales en función de las personas que hay en la sala para vacunarse".

Vacunas que se quedan sin dueño porque hay pacientes que se ausentan

La nevada provocada por Filomina hizo que varios pacientes no acudiesen al centro de salud cuando las dosis ya estaban preparadas, aunque una vez pasado el temporal, sigue habiendo pacientes que se ausentan, lo que da lugar a que las dosis queden sin dueño.

"Esto se debe, según vemos nosotros, a un cálculo inadecuado entre las dosis recibidas y el número de personas a vacunar", critica Rafael Rubio. De esta forma, las primeras dosis están bajo la lupa con el objetivo de que la segunda llegue a tiempo para cada paciente.