LA JUEZ LES ACUSA DE TRATAR DE DESTRUIR PRUEBAS
El sindicato de los Mossos: "Lo que parecen patadas y golpes pueden ser maniobras reglamentarias"
El sindicato de Mossos d'Esquadra defiende la actuación de los ocho agentes imputados por la paliza que pudo matar al empresario del Gayxample, Juan Andrés Benítez, mientras la juez cree que trataron de destruir pruebas, borrando las manchas de sangre de la calle y exigiendo a los vecinos que eliminaran las grabaciones de sus móviles.
Yasid fue el vecino del Raval que se peleó con Juan Andrés Benítez antes de que aparecieran los Mossos. La juez ha decidido desimputarlo del caso, al considerar que esa riña no provocó la muerte posterior del empresario del Gayxample.
Él mismo reconoce que al llegar los agentes la disputa había terminado y que quedó asombrado con la brutalidad con que se ensañaron con Benítez: "Con aquella rabia le machacaron. Le pegaron con porras, patadas y puñetazos".
La juez acusa a los ocho agentes de delito contra la vida, por los reiterados golpes en la cabeza de Juan Andrés, que presuntamente le causaron la muerte. A pesar de la claridad de las imágenes que los vecinos facilitaron a la instrucción, el sindicato de Mossos pide cautela a la hora de hablar de mala praxis.
David Miguel, del Sindicato Policial de Catalunya SPC Mossos d'Esquadra, afirma que "siempre hemos dicho que, cuando hay imágenes donde se ve a la policía utilizar la violencia, choca. Y lo que pueda parecer patadas y golpes, a lo mejor son maniobras que están dentro del protocolo, como pueda ser un golpe de distracción".
La juez también acusa a los agentes de obstrucción a la justicia porque, según indica el informe de la Policia Nacional, supuestamente trataron de destruir pruebas, borrando las manchas de sangre de la calle inmediatamente después la polémica actuación, y exigiendo a los vecinos que eliminaran las grabaciones de sus móviles.
El presidente de la Asamblea del Barrio del Raval, Iñaki García, denuncia "una actitud prepotente y arrogante que ha pasado a brutal, y que no queremos que quede impune". El colectivo de empresarios del Gayxample pide gestos más contundentes al Conseller de Interior y exigen la destitución fulminante del director general de la policía catalana.