Presenta un borrador a los agentes sociales

Teletrabajo: el Gobierno plantea el derecho a la desconexión y que la empresa corra con los gastos

Trabajo propone a los agentes sociales que el teletrabajo se considere regular a partir del 30% de la jornada. No obstante, el borrador del trabajo a distancia deja fuera a los trabajadores de la Administración.

Gobierno, sindicatos y empresarios han retomado este martes las negociaciones para regular el trabajo a distancia. laSexta ha tenido acceso al borrador que el Ejecutivo ha puesto sobre la mesa, que contempla que esta modalidad de trabajo se considerará regular cuando suponga al menos un 30% de la jornada.

Según fuentes de la CEOE, la reunión ha finalizado con "avances", aunque ahora los agentes sociales deben esperar a que el Ministerio de Trabajo remita un nuevo documento. Asimismo, han informado de que el Gobierno ha "aceptado" que se considere esta modalidad de trabajado cuando suponga al menos un 30% de la jornada. En un principio se partía del 20%.

El documento al que ha accedido laSexta también plantea que la empresa debe dotar al trabajador de los medios, equipos y herramientas necesarios para desarrollar su actividad y que el empleado no tendrá que asumir los gastos relacionados con estos. El desarrollo del trabajo a distancia, señala el borrador, deberá ser sufragado o compensado por la empresa.

El acuerdo entre empleado y empresa tendrá que incluir un inventario de los equipos que necesitará el trabajador y su vida útil, así como una enumeración de los gastos que pueda tener por trabajar a distancia. En ese acuerdo, se debería cuantificar la compensación que debe abonar la empresa por esos gastos. También debe incluir aspectos como el horario o el lugar elegido para teletrabajar.

Asimismo, la propuesta de Trabajo recoge que la empresa no podrá exigir al empleado que utilice sus propios dispositivos para el trabajo a distancia, ni que instale programas o aplicaciones en estos. Además, reconoce el derecho a la desconexión digital fuera del horario de trabajo.

También se abre la posibilidad de que el trabajador pueda flexibilizar su horario, respetando los tiempos de disponibilidad obligatoria. No obstante, la empresa podrá adoptar medidas de vigilancia y control para comprobar que el trabajador cumple con sus obligaciones laborales, si bien con consideración a su dignidad.

Por otra parte, el borrador del anteproyecto de Ley de Trabajo a Distancia deja fuera al personal laboral de las Administraciones Públicas, que se regirá por su normativa específica.

División entre los agentes sociales

Fuentes del diálogo social han indicado a laSexta que, mientras al inicio de la reunión los empresarios optaban por continuar con la normativa vigente hasta ahora, a medida que han transcurrido las horas, la patronal ya no plantea seguir con la actual normativa y apuesta por una nueva legislación. La intención, dicen, es alcanzar un acuerdo hoy mismo.

Los sindicatos mantienen que no seguirán con la norma antigua. Unai Sordo, el secretario general de Comisiones Obreras, en una entrevista en Al Rojo Vivo, ha asegurado que "lo que no es una opción es dejar las cosas como están": "Los asociados al trabajo tiene que correr a cargo de la empresa igual que en el centro de trabajo".

Desde el Ministerio que dirige Yolanda Díaz, por su parte, se niegan a alargar el teletrabajo sin una nueva normativa. Creen que España necesita una nueva ley de teletrabajo para adaptarse a Europa, máxime con la incertidumbre actual generada por la pandemia de coronavirus.

Mismos derechos que los trabajadores presenciales

El borrador presentado hoy, martes, recoge que los trabajadores que trabajen a distancia tendrán los mismos derechosy retribución que aquellos que lo hagan de forma presencial. Quienes teletrabajen tampoco podrían verse perjudicados en sueldo o tiempo de trabajo por las dificultades técnicas que puedan producirse en el teletrabajo.

Por otra parte, la propuesta establece que el trabajo a distancia sea voluntario para la empresa y el empleado, y que pueda formar parte del contrato inicial o bien implementarse posteriormente, aunque en cualquier caso tendría que formalizarse antes de empezar. El empleado, recoge el documento, no podría ser despedido si se niega a trabajar a distancia o no se adapta al teletrabajo.

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