Así es el zapatero de Ikea que causa furor entre los clientes

La pandemia de coronavirus ha cambiado completamente nuestra forma de entender y de convivir con nuestro entorno. Más aún, el confinamiento que se vio obligado a cumplir la sociedad española para poder atajar la curva de contagios por COVID-19 nos llevó a transformar la percepción de nuestro propio espacio personal: las casas dejaron de ser casas para convertirse -en la medida de lo posible- en oficinas, colegios, guarderías o residencias.

Y ya que la vida se reducía a vivir entre 'cuatro paredes', muchos vieron en esta circunstancia la oportunidad -o la necesidad, según se mire- de reorganizarse en su propio hogar para hacerlo más cómodo y habitable. Reformas, cambios notables en la decoración u objetos de lo más común ayudaron a reactivar ese espacio. E Ikea ha tenido mucha influencia en todo esto. Conocedora de la demanda, ha ido impulsando todo tipo de artículos que han hecho furor entre los clientes.

Entre ellos, un producto que está arrasando actualmente: un zapatero al precio de tres euros. El triunfo de este artículo entre el público puede deberse a su barato coste, pero también a su forma, pues no es un zapatero tradicional, al uso. No, funciona a modo de estante que permite recolocar el calzado de forma que ocupe poco espacio con un estilo moderno que permite su libre disposición por toda la casa.

Este producto se llama Grejig, y actualmente se puede encontrar en tiendas IKEA o en la propia página web de la multinacional sueca. El 'problema': la compañía ya está avisando de la baja disponibilidad del producto debido a la alta demanda. Además, solo es apto para tres o cuatro pares de zapatos. Pero no te preocupes, Ikea ya ha avisado de que no tardará en reponer el stock ante el éxito que está teniendo este producto.

Si tu problema viene dado porque el número de zapatos que tienes el mayor al que permite este estante-zapatero, la compañía cuenta con otros artículos similares y a un precio relativamente barato. Por ejemplo, el zapatero Trones, cuyo coste es de 19 euros y está disponible en negro y blanco. O también el modelo Tjusig, cuyo diseño facilita su adaptación en diferentes espacios y está hecho con madera maciza. Su precio: 40 euros.