CERCA DE LA PRISIÓN PERMANENTE
Ana Julia Quezada, impasible al escuchar el veredicto que la considera culpable de asesinato con alevosía de Gabriel Cruz
Totalmente serena, así estuvo Ana Julia Quezada mientras leían el veredicto que le considera culpable. Su actitud fue muy diferente a la de otros días del juicio, cuando llegó incluso a desmoronarse.
El jurado popular ha declarado a Ana Ana Julia Quezada culpable del asesinato con alevosía del niño Gabriel Cruz, delito por el que la magistrada Alejandra Dodero, que ha presidido la vista que la ha juzgado desde el pasado 9 de septiembre, podrá condenarla a prisión permanente revisable como pedían las acusaciones.
Mientras leían el veredicto, Ana Julia Quezada ha escuchado impasible y apenas haciendo un ligero movimiento de piernas.
Ana Julia, también culpable de delitos de lesiones psíquicas
Las siete mujeres y dos hombres del jurado la han declarado también culpable por unanimidad, como en todos los puntos de su veredicto, de sendos delitos de lesiones psíquicas y otros tantos contra la integridad moral a Ángel Cruz y Patricia Ramírez, padres del menor muerto el 27 de febrero del 2018 en Níjar (Almería).
Tras conocer el veredicto,la madre ha dicho que se ha conseguido "justicia" para su hijoy ha solicitado que "nunca más se hable de esta mujer porque esto será hacerle memoria a Gabriel".
Por su parte, el padre, que era pareja de la acusada en el momento de los hechos, ha manifestado que "se le ha hecho justicia a Gabriel y que esa mujer no le va a hacer daño a nadie más en la vida. Hay que sacarla de la sociedad porque es un peligro. Hubiese seguido haciendo daño. Los psicópatas tienen que estar encerrados y lejos de la sociedad, donde no puedan hacerle daño a nadie".
Según el jurado, Quezada, Ángel y Gabriel Cruz se desplazaron el 23 de febrero del 2018 a una finca de la abuela paterna del menor en Las Hortichuelas Bajas, en Níjar. Cuatro días después Gabriel le dijo a su abuela y a la acusada que se iba a jugar con unos primos que vivían cerca.
"La acusada, inmediatamente después de marcharse Gabriel de la vivienda, se subió a su vehículo e interceptó al niño, instándole a que le acompañara a la finca sita en Rodalquilar (Níjar) y ante la "confianza generada" por ésta al ser una "persona íntimamente vinculada a su entorno familiar desde que inició la relación con su padre, accedió a marcharse" con ella.
Ana Julia podría ser condenada a prisión permanente revisable
La fiscal y la acusación particular han reclamado prisión permanente revisable por el delito de asesinato con alevosía, mientras que para las lesiones psíquicas el Ministerio Público pide tres años de prisión en las relativas a Ángel y dos años y nueve meses en el de Patricia, mientras que el letrado de éstos pide tres años por cada uno.
Por los delitos contra la integridad moral el abogado de los padres ha reclamado dos años de cárcel. La defensa ha solicitado las penas mínimas en todos los casos y "lo establecido" en el Código Penal en el delito de asesinato.
La fiscal solicita que Quezada no pueda residir o acudir en el lugar de domicilio de la familia, órdenes de alejamiento respecto a los padres y abuela de mil metros durante 30 años, libertad vigilada y, entre otros, el pago de indemnizaciones de 770.000 euros a los progenitores por los daños morales y lesiones psíquicas, además de 160.000 euros por el daño moral a la abuela, y el pago de 202.203,84 euros por los gastos de la búsqueda del niño.
El abogado de Quezada, Esteban Hernández Thiel, ha asegurado a los medios que "técnicamente hay cuestiones que no podemos compartir y obviamente creemos que hay base para un recurso y así lo haremos, lo interpondremos por varias cuestiones técnicas".
Por su parte, el abogado de los padres, Francisco Torres, ha manifestado que es "difícil decir que uno está satisfecho" con un asunto como éste, si bien ha celebrado el resultado porque han tenido "muchos problemas, seguramente de más, dificultades en el propio juicio". "A veces nos hemos visto absolutamente solos"; ha asegurado.