La Policía lo estaba buscando

Aparece muerto el presunto asesino del portero de Alcalá 366 junto al tanatorio de la M30

La Policía ha encontrado el cuerpo sin vida de un hombre junto al tanatorio de la M30. Según fuentes judiciales, se trataría del presunto asesino de Esteban, el portero del edificio donde residía.

Alfredo, el presunto asesino de Esteban, portero de Alcalá 366, ha sido localizado sin vida en las proximidades de la M30 (Madrid), según han confirmado fuentes judiciales. La Policía, que investiga el asesinato del portero, buscaba a Alfredo, apodado 'El gorila' por algunos vecinos en el barrio, por el crimen, después de que el cadáver del portero fuese hallado en su vivienda.

Esteban desapareció el martes por la tarde, tras darle la merienda a su nieto y bajar a la portería, donde llevaba trabajando desde hacía 30 años. Sin embargo, sus vecinos y familiares ya no volvieron a verlo y pusieron una denuncia por la desaparición, después de recorrer el barrio y hospitales.

Al ver las imágenes de las cámaras de seguridad del edificio, el hijo de Esteban comprobó que su padre subió ese día a la planta del conflictivo vecino y ya no volvió a bajar. Tras conseguir una orden judicial, los bomberos y la Policía pudieron entrar en el piso y encontraron a la víctima apuñalada, momento en el que se comenzó a buscar a Alfredo.

El hijo de Esteban ha contado a laSexta que cuando vio las imágenes en las que salía su padre subiendo hacia el primer piso, se temió lo peor. "Al ver que mi padre subía a la zona de ese hombre, el más conflictivo de la comunidad, dije: 'ya está muerto'", ha expresado, a lo que ha añadido que el presunto agresor "le había estado pidiendo dinero" a su padre y "tenía deudas". "Seguro que le quiso ofrecer algo, vendía hasta la ropa de su madre fallecida. Y mi padre que es muy servicial, subió", ha contado Esteban hijo.

Las sospechas sobre el presunto asesino aumentaron cuando comprobaron en las imágenes que solo 30 minutos después de subir su padre a su vivienda, Alfredo bajó las escaleras y salió del edificio. Y lo hizo aseado, con ropa limpia, algo que extrañó al hijo del portero ya que, según ha señalado, "es un hombre que tiene síndrome de Diógenes". "Además, tenía un objeto tapado con toallas que parecía un cuchillo", ha destacado la respecto.

Por si fuera poco, Alfredo modificó parte de la portería para simular que Esteban se había marchado. "Colocó la silla del mostrador y apagó la luz para hacernos creer que mi padre ha salido", ha apuntado Esteban hijo.

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