Así se ha celebrado el apocalipsis en diferentes partes del mundo

Los sonidos de tambores, caracolas y ocarinas han resonado hoy en el centro de Madrid para agradecer a los dioses la llegada de la Nueva Era Maya, en un ritual ancestral bendecido con incienso de copal y amenizado por las danzas del grupo mexicano Guerreros de Luz.

La céntrica Plaza de Colón ha acogido el evento, organizado por la Oficina de turismo de México en España. Los danzantes, ataviados con penachos (coronas) de plumas de colores y trajes que representaban animales, han dado la bienvenida a una nueva etapa para la humanidad y han desmentido que los mayas predijeran el fin del mundo.

A las 12 del mediodía, coincidiendo con el horario en el que los mayas pronosticaron el cambio de era, los danzantes, ayudados por los asistentes, han creado "una puerta" con una fila de hombres y otra de mujeres, con el fin de "formar la energía masculina y femenina".

Para agradecer a los dioses y hacer el saludo a las "siete direcciones", han quemado incienso de copal y lo han enfocado hacia los cuatros puntos cardinales, además de hacia el cielo, la tierra y el corazón. "Queremos poner nuestro granito de arena, dando el saludo y el permiso a las siete direcciones, hermanándonos con los más de 5.000 danzantes que se reúnen hoy en Chichén Itzá (ciudad maya en el estado mexicano de Yucatán)" ha explicado a Efe Karla López, miembro del grupo de danza.

En Vigo han sido los primeros en celebrar el fin del mundo degustando aperitivos en las tiendas y tirando la casa por la ventana haciendo compras pero peor ha sido en Málaga, que han sufrido un temblor de la tierra de madrugada y han pensado que el fin había llegado.

Coincidencia o no, la construccióm de búnkers en España ha aumentado y los miembros de los movimientos survivalistas (prepper) han puesto a punto sus refugios. No creen que hoy sea el día pero sí que está cerca y que ellos ya están preparados para sobrevivir al fin del mundo.

En otros países,  los únicos que han sufrido han sido los bolsillos de los turistas que se han dejado seducir por los cantos del supuesto fin del mundo del calendario maya.

Los primeros en darse cuenta del fiasco han sido los taiwaneses, han hecho una cuenta atrás pero nada, el mundo seguía ahí. En China no se lo han tomado tan bien, quinientas personas han sido detenidas por esparcir rumores apocalípticos que incluían sublevarse contra el Gran Dragón Rojo.

Más tranquilos estaban los rusos después de que el presidente Putin dijera que aún quedan cuatro mil millones de años para el fin del mundo.