Así consiguió Clara Campoamor el sufragio femenino en España imponiéndose incluso a su propio partido

Una tensa discusión fue el preludio de una votación histórica. En 1931 se debatía en el Congreso de los Diputados el voto de las mujeres. Sólo había tres parlamentarias en un congreso con 470 electos. La única mujer que defendía el sufragio femenino era la progresista Clara Campoamor: "Luchó de una manera extraordinaria contra los propios prebostes de su partido" explica Nona Inés Vilariño, diputada constituyente en 1977.

"Es demasiado pronto para dar el voto a la mujer. La mujer es víctima del cura, tiene un pensamiento conservador, la derecha se va a aprovechar..." cuenta Ángel Bahamonde, catedrático de Historia de la Universidad Carlos III. Ese era el argumento utilizado por los diputados contrarios. Y finalmente el 19 de Noviembre de 1933 casi siete millones de mujeres pudieron votar por primera vez.

"Ella, en las primeras elecciones que se celebran con voto femenino no salió elegida diputada, defiendo esto y ni siquiera consigo que las mujeres me apoyen a mí" explica Nona Inés Vilariño. Este derecho les llegó a las mujeres españolas antes que a otras como las francesas o las italianas.

Ahora, 85 años después y con un 40% de mujeres en el hemiciclo, se abren propuestas como el voto a personas con discapacidad o a mayores de 16 años. "¿Por qué no a partir de los 16 años? Lo que habrá que procurar es que en la enseñanza media, el instituto, sea también una escuela de ciudadanía" asegura Ángel Bahamonde. Nuevos debates en la sociedad con un precedente esperanzador, el de Clara Campoamor y su lucha por la igualdad.