El 6 de enero
Carbonilla, el paje que 'chiva' a los Reyes Magos qué niños se portan mal y reciben carbón
Ni Melchor, ni Gaspar, ni Baltasar. El encargado de decidir quién recibe carbón cada 6 de enero es el paje Carbonilla, un personaje de la mitología navideña que se reconoce fácilmente por sus zapatillas y su chistera.
En la hemeroteca digital de la Biblioteca Nacional de España ni rastro. Bueno, ni rastro no, pues sí que se recogen textos de antaño sobre el material conocido como carbonilla - ese "conjunto de trozos menudos de carbón a medio quemar que pasan a través de la parrilla de los hogares", definido así por la RAE - . Pero nada de 'Carbonilla' con mayúscula, el personaje que verdaderamente interesa a los pequeños y del que, probablemente, desconocen su existencia.
Para conocer quién se esconde detrás de este nombre propio tan curioso es necesario recurrir a la calle (y toparse con alguien que siga esta tradición, pues no es la única que hay) o adentrarse en los relatos de los cuentos infantiles navideños. En ese caso, descubriremos que el carbón que reciben algunos niños cada 6 de enero no lo deja ni Melchor, ni Gaspar, ni Baltasar. El encargado de vigilar a los niños durante todo el año y ver quién se ha portado mal para dejarle carbón es Carbonilla.
También conocido como el paje Carbonilla, nombre compuesto recogido en el cuento 'La Navidad y los tres Reyes Magos' de Lorena Marín. Su aspecto sería algo así como un ser mitológico con características de gnomo y de duende, según la descripción que hace Emilio Sanjuán en su cuento infantil 'Carbonilla, un duende con chistera y zapatillas'.
Precisamente las zapatillas y la chistera serían otros de sus dos elementos más característicos, dos objetos a los que cabe estar atento de cara a la Cabalgata del 5 de enero. Así es, muchos estábamos equivocados sobre quién maneja realmente el cotarro de los regalos cada noche de Reyes. Los que se han dedicado a hacer la pelota a los tres Reyes Magos todavía están a tiempo de rectificar, pues es posible que el paje Carbonilla se deje ver esta noche por las cabalgatas.
Al menos por la de Gràcia ya lo hizo. Prueba de ello es que algunos padres ya se han fotografiado con él y han intercambiado unas palabras. Más les vale a algunos pequeños adelantarse esta noche para hablar con el simpático duende antes de que lo hagan sus padres. El pescado no está vendido.