Casas inundadas por la ceniza y con signos de la 'huida': nos adentramos en la zona de exclusión del volcán de La Palma

82 días después de que emitiera el primer rugido, el volcán de La Palma sigue experimentando una emulsión continua de gases y lava. En las últimas horas, la gran cantidad de gases emitidos han comprometido la calidad del aire y, más allá de eso, las cenizas continúan anegando terrenos enteros.

laSexta ha accedido a la zona de exclusión de Tacande, a los pies del volcán, donde aún se aprecia cómo muchos de sus vecinos tuvieron que abandonar sus casas dejándolo todo tal y como estaba. En los últimos días, la zona se ha visto amenazada por la colada norte, que hasta hace una semana estaba activa y su altura alcanza los 15 metros.

Allí, como se aprecia en el vídeo principal de esta noticia, aún se puede ver bajo las cenizas ropa tendida y teléfonos descolgados. Signos de una 'huida' a la lava y a la toxicidad de los gases. Ahora, la ceniza llega hasta prácticamente la ventana y ha cubierto por completo las escaleras de acceso de una de sus casas. Sin embargo, sigue milagrosamente en pie porque la colada se paró a tan solo unos metros de ella.

Casi tres meses después de la primera emisión de lava en Cumbre Vieja, Tacande es ejemplo de los estragos que ha causado el volcán en la isla y con los que tendrán que convivir los palmeros durante mucho tiempo.

Así evoluciona el volcán

Los centros de emisión de lava del cono principal del volcán de Cumbre Vieja se encuentran muy poco activos y el gran problema que genera ahora la erupción son los gases, que están dificultando el acceso a viviendas e incluso, las obras para finalizar la nueva carretera a Puerto Naos. El director técnico del Plan de Emergencias por Riesgo Volcánico de Canarias (Pevolca), Miguel Ángel Morcuende, ha señalado en la rueda de prensa posterior a la reunión de los comités técnico y científico que el panorama que presenta este viernes la erupción es "sensiblemente parecido" al registrado ayer en cuanto a las coladas.

Al respecto, la portavoz científica, María José Blanco, ha indicado que desde el foco efusivo situado al oeste del cono principal la lava sigue discurriendo por un tubo volcánico que tiene varios jameos, y del que parten dos coladas que se desplazan, también al oeste, sobre las anteriores. La más activa, que confluyó sobre la colada que surgió al oeste de la montaña del Cogote (actualmente inactiva) sigue sobre esta última y se precipita sobre la isla baja, en la zona de Las Hoyas.