Por homicidio

Detienen a un hombre buscado en Francia al acudir a una comisaría en Bilbao para preguntar por su estado

Sobre él pesaba una Orden Europea de Detención y Entrega por agredir con un arma blanca a dos familiares, cortándole el cuello a una de ellos. Según la legislación francesa, el detenido se enfrenta a una posible condena de 30 años de prisión.

Un hombre buscado en Francia por agresión y tentativa de homicidio fue detenido el pasado 28 de junio en la Jefatura Superior de Policía de Bilbao cuando entró en las oficinas para preguntar por su situación administrativa, ha informado la Policía Nacional.

Según ha informado este miércoles Ministerio del Interior, la detención se produjo el pasado 28 de junio, cuando un ciudadano de origen iraquí se presentó en la Jefatura Superior de Policía del País Vasco en Bilbao, para solicitar información sobre su situación administrativa.

Los investigadores que le atendieron inicialmente comprobaron que su identidad podía ser la de un fugitivo. Sobre él pesaba una Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE) por agredir con un arma blanca a dos familiares, cortándole el cuello a una de ellos.

Tras revisar los archivos policiales y hacer múltiples gestiones con Eurodac - base de datos europea de huellas dactilares para identificar a personas que cruzan irregularmente las fronteras -, detectaron que el sospechoso había solicitado asilo en varios países de la Unión antes de venir a España y que, efectivamente, su filiación coincidía con la de un ciudadano de Irak buscado a nivel europeo por Francia.

Para corroborar ese extremo y agilizar las pesquisas, los agentes contactaron con el Centro de Cooperación Policial y Aduanero (CCPA) de Hendaya, donde las autoridades francesas les confirmaron la identidad del hombre que se encontraba en Bilbao solicitando información.

Ante esta confirmación y "tras extremar las medidas de seguridad", procedieron a su inmediata detención y posterior trasladado hasta el Juzgado Central de Instrucción, de la Audiencia Nacional, para su entrega a Francia. Según la legislación francesa, el detenido se enfrenta a una posible condena de 30 años de prisión.

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