Incendios
España en llamas: el calor y la sequía propician el peor marzo de incendios desde 2006
España es ya el país más castigado por las llamas de toda la Unión Europea. El calor adelantado y la sequía son una peligrosa combinación que ha propiciado que el pasado mes de marzo haya sido el peor desde 2006 en cuanto a incendios.
España ha registrado el peor mes marzo desde el año 2006, con más de 50.000 hectáreas quemadas en el país. Son incendios extremos que llegan en una época fuera de lo habitual, y que en Asturias han provocado las mayores emisiones de carbono, aerosoles y micropartículas para un mes de marzo desde que existen registros.
Joanna Ivars, meteoróloga de laSexta, explica que "algunas estaciones de medición en Asturias llegaron a registrar valores muy por encima del umbral de lo que se considera óptimo para la salud en cuanto a micropartículas". Esta situación afecta no solo a la población, sino también a la vegetación de la zona, que llevaba meses muy seca y con ausencia de precipitaciones.
Un cóctel explosivo que hizo que miles de hectáreas se calcinaran en muy pocos días. "Los primeros meses fueron muy secos y en nueve días se quemaron 11.000 hectáreas", asegura Ivars, como puede observarse en el vídeo superior.
Más Noticias
Los peligros de seguir tendencias virales de cosmética sin consultar antes a los expertos Indignación entre los mayores en residencias por tener que compartir habitación Un hombre es herido grave en Zamora por un disparo de bala Seis detenidos por asaltar una vivienda, maniatar y golpear a sus dueños en Valencia Así contó laSexta el dramático terremoto de Lorca en 2011, del que se cumplen ya 13 años
Estos incendios han estado alimentados por la falta de precipitaciones, las altas temperaturas y una atmósfera muy estable. España se sitúa como el país más castigado por las llamas de la Unión Europea.
"Un miedo diario"
La justicia investiga la precariedad de la Guardia Civil en su lucha contra el narco tras el asesinato de dos agentes en Barbate
A la carencia de medios humanos y materiales se le suma la pérdida de respeto a la autoridad entre narcos. Por eso la AUGC, así como las asociaciones de familiares de agentes, denuncian una situación que tres meses después sigue exactamente igual.