Varios ya han sido dados de alta
Extremadura confirma sus dos primeros casos del virus del Nilo que se suman a los 13 de Sevilla y Huelva
Extremadura ha confirmado sus dos primeros casos del virus del Nilo, un varón de 66 años y una mujer de 56, que se suman a los 13 ya notificados por la Junta de Andalucía entre Sevilla y Huelva.
Extremadura ha confirmado sus dos primeros casos del virus del Nilo: un varón de 66 años y una mujer de 56. Dos personas que se suman a las 13 ya confirmadas por la Junta de Andalucía esta semana entre las provincias de Sevilla y Huelva.
En el caso de los extremeños, ambos se encuentran estables, aunque se mantienen ingresados en el hospital.
Por su parte, la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía informó esta última semana que se han confirmado 13 nuevos casos de virus del Nilo en seis personas de Dos Hermanas, tres de Coria del Río, una de La Puebla del Río, otra de Mairena del Aljarafe y una en Alcalá de Guadaíra, en la provincia de Sevilla, y el último en Campofrío (Huelva).
De estos 13 casos, 11 ya se encuentran dados de alta, según un comunicado difundido esta noche por la Junta. Por otro lado, se ha detectado la presencia de Virus del Nilo Occidental (VNO) en las capturas realizadas en los municipios sevillanos de Gelves y Dos Hermanas, así como en Barbate y Jerez de la Frontera, en la provincia de Cádiz.
Asimismo, la Consejería de Salud comunica que la Estación Biológica de Doñana ha localizado también la presencia del virus en mosquitos capturados, la semana pasada, en los municipios sevillanos de La Puebla del Río, Coria del Río y Palomares del Río, pero no se ha detectado en trampas dentro del núcleo de La Puebla del Rio.
Desde la Consejería de Salud y Consumo se insiste en la necesidad de que la población mantenga las medidas preventivas para evitar picaduras de mosquitos en las horas de mayor actividad de las especies transmisoras de esta enfermedad (en horas cercanas al amanecer y posteriores al atardecer), tanto individuales –uso de repelentes registrados de uso tópico y ropa clara y que cubra la mayor parte de la piel–, así como domésticas –uso de mosquiteras o repelentes ambientales–, sobre todo para la población vulnerable con inmunidad comprometida.