Memoria Histórica

Familiares de víctimas del franquismo temen por el futuro de las exhumaciones en la fosa de Colmenar

A sus 91 años, Benita mantiene la esperanza de encontrar a su padre, pero teme que un cambio de gobierno paralice los trabajos, "que no donen ya y se cierre". La asociación Comisión de la Verdad afirma que no lo permitirán.

Cada resto que se recupera en la fosa del Cementerio de Colmenar Viejo, la primera que se abrió en la Comunidad de Madrid, es una halo de esperanza para los familiares de las víctimas del franquismo que aún no han podido encontrar a sus seres queridos. Aunque ven que cada vez hay más hallazgos, temen que un cambio de gobierno paralice los trabajos de exhumación.

Y es que entre las lápidas los restos de decenas de víctimas siguen esperando a ser recuperados. Almudena García-Rubio, jefa de la excavación y exhumación de la fosa, precisa que de momento han documentado 25. Algunos, señala, "se han enterrado sin ataúd" y "hay algunos ataúdes más que se están empezando a documentar".

La de Colmenar fue la primera exhumación de víctimas civiles de la Guerra Civil llevada a cabo en la Comunidad de Madrid. Luis Pérez Lara, presidente de la asociación Comisión de la Verdad, celebra que se han llevado "la gran alegría de que desde el principio han empezado a aparecer aquí y, además, en cantidad".

Unos trabajos que suponen la culminación a décadas de búsqueda para familiares como Benita Navacerrada, quien, a sus 91 años, espera en el cementerio cada día que encuentren a su padre: "Mantengo la esperanza viva porque veo que están saliendo de verdad, están saliendo bastantes", sostiene.

Los nuevos hallazgos se suman a los 13 cuerpos encontrados en la primera fase de la exhumación. Ahora mismo, según detalla García-Rubio, están trabajando en una zona del camposanto que "en el año 39 era el límite del cementerio". "Estamos encontrando, creemos, la mayoría de los cuerpos", afirma.

La segunda fase de la exhumación comenzó el año pasado y se ha reactivado gracias a la ayuda de la Secretaría de Estado de Memoria Democrática. Sin embargo, los familiares temen que tras las últimas elecciones pueda ser la última: "Tengo miedo por el cambio de gobierno, que no donen ya, y se cierre, y ya está, el que quede ahí va a quedar", lamenta Benita.

Pérez Lara, sin embargo, advierte al próximo Ejecutivo de lo que ocurriría si hiciera eso: "Nos encontraría en el mismo camino que venimos transitando desde hace 84 años, no lo vamos a permitir", sentencia.

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