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A PETICIÓN DE UN ALCALDE

¿Hablar de la represión franquista tiene consecuencias?: una anciana declara en un juzgado por dar su testimonio sobre la dictadura

Carmen García Pellón ha tenido que comparecer ante un juzgado por hablar de la represión que sufrió su familia durante la dictadura. Lo ha hecho después de que el nieto de un alcalde franquista le obligara a presentar su rectificación.

  Madrid | 25/05/2019
Carmen García Pellón | Laura Pérez Ruano

La historia de Carmen está indignando a las redes sociales. A sus 90 años, ha tenido que comparecer en un juzgado por hablar sobre la represión que vivieron en Navarra entre el 1936 y el 1945.

Según explica en Twitter Laura Pérez Ruano, parlamentaria foral de Orain Bai-Ahora Sí, Carmen García Pellón ha sido citada en el juzgado por dar su testimonio en un trabajo de investigación sobre la represión. Y es que ahora Roberto Martínez, el alcalde de Yesa, Navarra, nieto de un regidor franquista, le insta a retractarse.

Sin embargo, la anciana se ha negado a rectificar porque la represión de la dictadura le tocó muy de cerca. Según 'Público', con solo ocho años vio como dos guardias se llevaban a su padre y un tiempo después, su familia sufrió una expropiación de parte de sus tierras. "Fusilaron a mi padre, nos quitaron tierras y ahora, con 90 años, quieren que me calle. Pero eso no va a pasar", señala en el citado diario.

Su testimonio fue recogido en una entrevista que se difundió en Youtube y en él, Carmen señalaba a Isidoro Martínez, abuelo del actual alcalde de Yesa, como uno de regidores que participaron en el robo de tierras a su familia.

En los tweets difundidos por Laura Pérez Ruano también se recogen imágenes del escrito presentado por el alcalde de Yesa, que ha llevado a la anciana a comparecer ante un juzgado.

"Formulo una solicitud para que Carmen García Pellón se avenga a retractarse de las declaraciones efectuadas en las que imputa al abuelo de mi representado haber robado todo lo que pudo, haber sido ladrón, apropiarse de todos los terrenos del pueblo y haberse quedado con las tierras de los fusilados", reza en la carta que presentó el letrado al juzgado.

Tras negarse a hacer una rectificación, Carmen podría enfrentarse a una querella por parte de Roberto Martínez, que podría tener consecuencias civiles y penales. "Los "herederos ideológicos" de la masacre, lejos de pedir perdón, no sólo tienen la desfachatez de mandar a los tribunales a las víctimas, sino que exhiben las placas de reconocimiento a los asesinados que la ley exige, sobre un cuadro eléctrico; atentando contra su dignidad", sentencia Laura Pérez Ruano.