Uno es consecuencia del otro
¿Es igual Black Week que Black Friday?
Black Friday solo hay uno, pero con el paso del tiempo las grandes compañías han estirado visiblemente sus descuentos. Las fronteras de cuándo se compra y cuándo se deja de comprar se difuminan.
El Black Friday es otro ejemplo más de la influencia estadounidense en el mundo. Igual que Halloween o Papá Noel, las tradiciones de la parte más occidental del globo se han hecho un hueco en la cotidianidad europea. Hace apenas diez años este evento no existía en España, pero en el último lustro su crecimiento en publicidad y su aceptación por parte de los comercios ha hecho que se convierta en un habitual del mes de noviembre.
Aunque se desconoce el verdadero origen del Black Friday, se ha establecido un consenso en cuanto a su fecha de celebración: el primer viernes posterior al día de Acción de Gracias. Ahora bien, con el paso del tiempo, esa equis en el calendario se ha ido extendiendo a lo largo de toda la hoja, hasta el punto de abarcar una semana entera. ¿Por qué si el Black Friday dura un solo día se habla de él desde mucho antes? ¿Por qué se puede alargar hasta después? La evolución del acontecimiento ha hecho que los comercios exploten su tirada cada vez más temprano. Ya no solo se habla del Viernes Negro, sino que algunas marcas se atreven a publicitar con Black Week (Semana Negra).
Día, semana y mes: el alargue del Black Friday
El Black Friday y la Black Week no son lo mismo. Black Friday solo hay uno, pero su influencia ha hecho que se busquen nuevos métodos para alargar los descuentos. Este mismo año podemos ver varios ejemplos de esta estrategia: Amazon tiene activa una campaña de ofertas desde el pasado 26 de octubre, PcComponentes lleva desde el domingo 15 ofreciendo descuentos diarios en ordenadores, electrodomésticos o televisores y El Corte Inglés tiene ya habilitada una página concreta para este día.
El ejemplo más exagerado de esta práctica lo protagoniza Media Markt: se trata de la compañía que primero celebró el evento en España (2012) y, a diferencia de sus competidores, no celebra una Black Week, sino que festeja un ‘Black Noviembre’. Las ofertas se han expuesto durante todo el mes y finalizarán el próximo domingo 22 a las 22:00 horas. No obstante, el mismo día 27, cuando se celebra el Viernes Negro, los consumidores también podrán acceder a otros descuentos.
Amazon, por otro lado, también se adelanta, pero en su caso presentará la gran mayoría de ofertas en un evento especial: el Black Friday Live, en el que los usuarios podrán conocer en exclusiva los descuentos del Viernes Negro.
La gestión que hacen las empresas de este evento tiene una doble dirección. Hemos hablado de los descuentos previos, pero también hay otros tantos posteriores, hasta el punto de que se entremezclan con otra festividad: El Cyber Monday. De nuevo, los días de incitación al consumo se extienden.
El Cyber Monday es el día de mayor descuentos y compras por Internet de todo el año. Es decir, a diferencia del Viernes Negro —en el que los usuarios pueden adquirir productos de forma tanto física como en línea—, las compras en este acontecimiento se realizan exclusivamente ‘online’. Nació en 2005 y surgió como respuesta al Black Friday: la comunidad Shop.org acuñó ese nombre y decidió establecer la fecha en el primer lunes posterior al Viernes Negro.
Todas estas decisiones, acompañadas del auge que ha tenido la celebración del Black Friday en todo el mundo, han hecho que las fronteras de cuándo acaba y cuándo empieza se difuminen. Faltan ocho días para que se celebre oficialmente, pero eso es solo una fecha.