Con el satélite español 'Paz'
La impresionante evolución de la erupción del volcán de La Palma vista desde el espacio
Gracias a las imágenes ofrecidas por un satélite español se puede ver perfectamente cómo la erupción volcánica y las coladas de lava han arrasado con La Palma.
El satélite español "Paz", que órbita la Tierra desde el año 2018, ha captado los cambios que se han registrado en la isla de La Palma desde el pasado 16 de septiembre, antes de que entrara en erupción el volcán. El "Paz", una de las mayores apuestas de la industria aeroespacial española y que forma parte del Programa Nacional de Observación de la Tierra por Satélite, está dotado con una moderna tecnología radar y es capaz de captar y ofrecer unas 100 imágenes cada día y de cubrir un área de más de 300.000 kilómetros cuadrados.
El seguimiento de toda la información que está captando el satélite español se está realizando en el Centro Espacial del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) en la localidad madrileña de Torrejón, donde se recogen las imágenes de los efectos de la erupción del volcán de Cumbre Vieja.
Las imágenes captadas por este satélite, ha informado el INTA en una nota de prensa difundida, muestran los cambios que se han registrado en la isla entre los días 16 de septiembre -cuando había ya comenzado el enjambre sísmico pero no se había producido todavía la erupción- y el 2 de octubre.
Las fotografías y vídeos muestran las nuevas bocas que han aparecido durante los últimos días o la lava avanzando hacia la costa, así como los elementos que han desaparecido en ese avance de la lava hacia el océano Atlántico.
Los datos que proporcionan los satélites están resultando cruciales para monitorizar y controlar la situación que se ha desencadenado en La Palma, y a los que llegan desde el "Paz" se suman los que diariamente facilitan los satélites "Sentinel-1", "Sentinel-2" y "Sentinel-5P" del programa espacial europeo "Copernicus". Los últimos datos que ha facilitado el programa europeo revelan que la colada de lava ha ocupado ya casi 450 hectáreas y destruido 1.046 edificios.