REYERTA EN HUESCA
Un intento de concertar una boda entre hijos de familias gitanas acaba con dos personas apuñaladas
El fallido intento de una familia de etnia gitana de concertar la boda de uno de sus hijos con la hija menor de otro grupo familiar fue el detonante de una reyerta registrada en Huesca que terminó con el apuñalamiento de dos miembros de uno de los clanes.
Este es el relato incluido en el auto dictado por el titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Huesca que ordenó el ingreso en prisión del padre del joven pretendiente como presunto autor de las lesiones o del intento de homicidio del progenitor de la menor y de su abuela.
La reyerta tuvo lugar la madrugada del pasado lunes en la calle Ronda Isuela, en el barrio del Perpetuo Socorro de la capital altoaragonesa y enfrentó a la familia del joven, procedente de la localidad oscense de Sabiñánigo, con la de la menor, residente en Lérida.
El auto judicial, hecho público por el Tribunal Superior de Justicia de Aragón, relata que las dos familias se reunieron para encontrar a la pareja, que mantenía una relación de "naturaleza sexual", y tratar de concertar una boda entre ambos.
A tenor del atestado policial, el juez destaca que ante la negativa de la familia de la menor a acordar la boda, el padre del chico, de 52 años, apuñaló al padre y a la abuela de la chica con un cuchillo de 17 centímetros de hoja.
La llegada de agentes nacionales y municipales causó una huida precipitada de la familia del agresor en dirección a Lérida, aunque la intervención de las patrullas desplazadas impidió la fuga. Los heridos fueron trasladados al Hospital San Jorge, donde evolucionan favorablemente de sus heridas tras ser intervenidos ambos quirúrgicamente.
En el registro del vehículo de la familia de Lérida, los agentes intervinieron además un machete de 40 centímetros de hoja, una bayoneta de 16, una navaja también de 16 y un arma de descarga eléctrica, todo material prohibido.
En su auto, el juez admite la petición de prisión provisional comunicada y sin fianza hecha por la fiscalía a partir de los datos recabados por los investigadores y, tras valorar el riesgo de fuga del detenido dada la gravedad de los delitos imputados, descarta la petición de libertad provisional formulada por su abogado.
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