La justicia italiana obliga a Juana Rivas a devolver a su hijo menor a su padre si España no toma medidas cautelares

La justicia italiana obligaba a Juana Rivas a devolver a su hijo menor con su padre a Italia que tiene su custodia. Así lo decidió el Tribunal de Cagliari sobre la custodia del hijo pequeño que Rivas tuvo con su expareja, el italiano Francesco Arcuri, en el caso de que la justicia española no tomase medidas cautelares a lo largo de este martes lo cual, a mediodía parece que no pasará.

En un segundo comunicado, el equipo jurídico de Rivas ha anunciado que el Juzgado granadino donde recaía la competencia de establecer protección al menor se inhibe al Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Granada en el que la magistrada titular todavía se encuentra de vacaciones. "La magistrada suplente nos indica que no puede adoptar ninguna medida hasta que el expediente no sea remitido por el anterior Juzgado, y sea debidamente examinado", reza el comunicado al que ha accedido laSexta.

Es por ello que "ante la extrema urgencia de la situación, pues mañana miércoles el menor debe retornar a Italia con su padre -procesado por maltratarle-", la asistencia letrada de Rivas se ha dirigido a la fiscal jefa de la Fiscalía Provincial de Granada, para denunciar la situación y rogarle que sea el Ministerio Público quien en "la mayor brevedad" adopte medidas cautelares.

El equipo jurídico de Rivas informaba a primera hora de este martes en un comunicado que el equivalente italiano a una audiencia provincial les había notificado la obligación de que el menor, que tiene ahora 10 años, vuelva a casa con su padre antes del 8 de enero, en respuesta a la petición de esta vecina de Maracena (Granada), que ha vuelto a denunciar al que fue su marido.

Asimismo, la asistencia letrada de Rivas también cursó una denuncia ante la jurisdicción penal italiana por amenazas y coacciones al menor, que al llegar a España relató que su padre "le obliga a mentir sobre el maltrato que sufre" y declarar a su favor en el procedimiento italiano.

En este contexto, el despacho de Aránguez Abogados que representa a Rivas solicitó el pasado 26 de diciembre medidas cautelares de protección del menor ante el Juzgado de Primera Instancia 10 de Granada, sin que de momento hayan recibido respuesta. Según Aránguez, la titular de este juzgado se ha comprometido a dictar una resolución este mismo martes para cumplir con los plazos de la justicia italiana.

En concreto, Juana Rivas pidió a la justicia italiana que su hijo permanezca en España por el "grave riesgo" que corre con su padre. Tal y como aseguró el abogado de Juana Rivas, Carlos Aránguez, en Más Vale Tarde, el deseo del hijo menor de Rivas, Daniel, de 10 años, es que "quiere vivir con su madre".

"Daniel ha manifestado nada más llegar a España que quiere vivir con su madre, que no quiere regresar a Italia, y ha dicho textualmente que teme por su vida, que sufre una presión psicológica y un control absoluto por parte de su padre. Relata también malos tratos físicos", contó el abogado el pasado 3 de enero en laSexta. Palabras que coincidían con la denuncia que el hermano de Daniel e hijo mayor de Rivas compartió mediante un vídeo.

En los últimos días, Rivas también ha denunciado a Arcuri por enviarle varios mensajes "intimidatorios" y por un "constante acoso telefónico" con más de cuarenta llamadas en una semana que, según su equipo jurídico, constituyen un delito de violencia de género por amenazas leves y acoso telefónico. Estas denuncias se suman a un nuevo procesamiento a Arcuri en Italia por delitos de maltrato a sus dos hijos que el italiano ha negado.

Esta obligación de la justicia italiana se produce varios días después de que Juana Rivas pidiera a la justicia italiana que su hijo permanezca en España por el "grave riesgo" que corre con su padre. Tal y como aseguró el abogado de Juana Rivas, Carlos Aránguez, en Más Vale Tarde, el deseo del hijo menor de Rivas, Daniel, de 10 años, es que "quiere vivir con su madre".

"Daniel ha manifestado nada más llegar a España que quiere vivir con su madre, que no quiere regresar a Italia, y ha dicho textualmente que teme por su vida, que sufre una presión psicológica y un control absoluto por parte de su padre. Relata también malos tratos físicos", contó el abogado el pasado 3 de enero en laSexta. Palabras que coincidían con la denuncia que el hermano de Daniel e hijo mayor de Rivas compartió mediante un vídeo.

Juana Rivas fue condenada a cinco años de prisión por dos delitos de sustracción de menores por desaparecer con sus hijos, en el verano de 2017, para evitar que volvieran con su expareja, al que denunció por maltrato. El Supremo estimó parcialmente el recurso de esta vecina de Maracena y le rebajó la pena a la mitad al considerar que, aunque fueron dos los menores sustraídos, cometió un único delito.

Rivas recibió un indulto parcial por el que el Supremo conmutó su condena firme por 180 días de trabajos en beneficio de la comunidad y un curso de parentalidad positiva. Medida de gracia que no eliminaba sus antecedentes en la justicia italiana y que quedaría anulada ante la comisión de un delito como no entregar al menor de los hijos a su padre, que tiene la custodia.