La acosaba en el trabajo
Una madre corre tras el agresor de su hija y la salva de ser secuestrada en Nueva York
La madre de la víctima, que oyó los gritos desde su casa, corrió tras su hija para evitar que el hombre secuestrara a su hija en un edificio de Nueva York. En el coche del agresor había cuerdas y pastillas para dormir.
Cuando Lex, de 18 años, volvía a casa de sacar a su perro fue asaltada por la espalda y arrastrada escaleras abajo. La madre de la víctima, que oyó los gritos desde su casa, corrió tras su hija para evitar que el hombre secuestrara a su hija en un edificio de Nueva York.
El agresor, que ocultaba su rostro bajo una capucha, gorra y mascarilla, agarró por el hombro a la joven cuando iba a entrar a su casa y la arrastró escaleras abajo. Como se puede ver en las imágenes, la cámara de vigilancia recoge toda la secuencia, incluido cuando Adriana, la madre de la joven, es alertada por los gritos y sale en su búsqueda.
La madre de la víctima ha relatado la escena como la "más terrorífica que te puedas imaginar". "Salgo corriendo y veo que este hombre la arrastra desde la cuarta hasta la primera planta", contó Adriana a diferentes medios.
La madre intentó atrapar al hombre, pero tras el forcejeo se dislocó el hombro y tuvo que pedir ayuda a un vecino. Gus Bougas, el vecino de la joven contó que la madre "salió corriendo del edificio gritando mi nombre. Lo vi y caí encima de él".
La actualmente conocida por medios estadounidenses como "mamá osa", confiesa que el acoso no viene de ahora, sino de cuando el atacante de 25 años trabajaba con su hija en un supermercado. "Comenzó a seguirla escondiéndose detrás de los coches", relata la madre.
Cuando llegó la policía encontró en el coche del hombre, que ya ha sido detenido, una bolsa con cuerdas y pastillas para dormir.
"Por la mañana ya había llamadas"
El 112 de Valencia estuvo recibiendo avisos para rescates desde la mañana de la DANA
Amparo López, gestora de emergencias en el 112 de la Comunidad Valenciana, ha explicado a laSexta cómo el 112 estuvo recibiendo llamadas de gente pidiendo ayuda desde la mañana en la que sucedió la DANA.