La lava cae al mar tras superar todos los obstáculos de la Cumbre Vieja

La lava se precipita por una cascada de 100 metros hacia el Océano Atlántico. Tras diez días de erupción volcánica en la Cumbre Vieja de La Palma, el magma ha conseguido sortear todos los obstáculos que le separaban del mar, alcanzándolo a las 00:00 horas de este miércoles 29 de septiembre (hora peninsular).

Durante la tarde de este martes, una enorme lengua de lava era ya visible desde el muelle de Tazacorte. A primera hora de la tarde la colada principal se disgregaba en varios dedos por la cantidad de lava que agregaba el volcán y, a las 21:00 horas (peninsular) lograba superar la montaña de Todoque, el que se esperaba fuera un obstáculo para su avance.

Finalmente, la lava ha finalizado su sendero al mar, como se puede ver en esta imagen facilitada por el Instituto Español de Oceanografía:

Durante la jornada del martes la lengua ha llegado a dividirse en cinco ríos, aunque posteriormente uno de ellos se ha unificado dejando cuatro cauces que avanzaban su camino al mar. Dos de estas ramificaciones han caído por el lado sur de la montaña de Todoque, mientras que las restantes han logrado descender por el norte de la misma, superándola.

Según los últimos datos, la lava ha destruido totalmente 656 edificaciones y afectado a 744. Además, la superficie arrasada hasta el momento alcanza ya las 267,5 hectáreas, según la información del satélite europeo Copernicus.

Nube tóxica

El avance de esta lengua durante la tarde de este martes ha provocado la quema de fertilizantes y plásticos a causa de el acercamiento de la lava a las plataneras, arrancando así una inmensa nube de humo que, según los expertos, podría ser más tóxica que la que emana de la propia erupción.

"La combustión de plásticos involucra muchas sustancias químicas, que probablemente sean más tóxicas que la propia columna eruptiva del volcán", ha explicado el portavoz de INVOLCAN, David Calvo.

Continúa la actividad sísmica

A los temidos efectos del impacto de la lava con el agua se suma la actividad sísmica en la isla. Durante la última jornada se han detectado ya 12 seísmos. El primero a primera hora de la mañana, a dos kilómetros de profundidad en El Paso. Uno de los más fuertes, de 3,4 grados de magnitud, se ha producido a las 17:15 horas en la zona de Fuencaliente.

El Instituto de Geociencias de Madrid ha indicado que este enjambre sísmicos se debe a que el volcán ha entrado en una "fase efusiva donde coladas, de naturaleza más fluidas, bajan del cono principal". Un hecho que entra dentro de los parámetros de este tipo de volcanes, los estrombolianos, con fases más explosivas y otras más efusivas.

Roberto Nazco, presidente de la asociación de Bomberos de La Palma, ha coincidido con esta versión, explicando en Más Vale Tarde que los seísmos de Fuencaliente no implican que vaya a haber una nueva apertura del volcán por una boca a kilómetros de las anteriores: "No son seísmos muy continuados y por su profundidad es imposible que supongan una nueva boca, ya que son a bastante profundidad. Implica que se está desplazando el magma hasta la zona de la Cumbre Vieja".

Primeras ayudas

Nueve días después de que el volcán de La Palma entrara en erupción, el Consejo de Ministros ha declarado a toda la isla zona catastrófica y ha aprobado las primeras ayudas, 10,5 millones de euros destinados a adquirir 107 viviendas para los damnificados, así como muebles y electrodomésticos.

Son parte de las ayudas de urgencia previas a la fase de reconstrucción de la isla, que consistirá en la reparación y restauración de daños en viviendas, infraestructuras viarias hidráulicas, explotaciones ganaderas, cultivos, zonas forestales y equipamientos públicos.