Tras analizar 136 muestras
La OCU alerta de la presencia de arsénico en el arroz, especialmente en la variedad integral y en las tortitas
La OCU ha analizado 136 muestras de arroz y de productos hechos con este cereal, detectando pequeñas cantidades de arsénico inorgánico en ellas. Un hecho que podría ser perjudicial para quienes basen su dieta en este alimento.
La OCU alerta de que ha encontrado pequeñas cantidades de arsénico inorgánico en el arroz. Tras analizar 136 muestras de alimentos que contienen este tipo de cereales, la Organización de Consumidores y Usuarios ha indicado que este elemento se ha detectado, sobre todo, en la variedad integral y en las tortitas.
En menor medida, también se ha detectado arsénico en el arroz blanco y en los cereales del desayuno de arroz inflado. La OCU ha indicado que la cantidad encontrada está por debajo de los valores permitidos por normativa, aclarando que pese a todo, si se consumen en exceso, podría ser perjudicial, sobre todo, para aquellas personas que basan gran parte de su alimentación en el arroz.
Además, también se ha detectado arsénico en algunas papillas de cereales instantáneos que contienen este alimento, lo que hace que con dos raciones ya se supere el límite máximo diario admisible para un bebé de seis meses.
Desde la página web de la OCU recuerdan que el consumo de arsénico intenso y prolongado en el tiempo puede provocar su acumulación en el organismo, lo que puede originar "lesiones en la piel, diabetes, trastornos cardiovasculares y cáncer, entre otras patologías".
Un consumo grave, por ejemplo de tortitas, sería de entre 16 y 23 al día, aunque la cantidad de este tipo arroces que podamos tomar dependerá de nuestro peso y de nuestra edad.
"Los que más suelen llevar son los que vienen de una agricultura países subdesarrollados", explica Vanessa Martín, nutricionista del Instituto Valenciano Digestivo. Además, recomienda a embarazadas y a niños controlar el consumo de estos productos.
Por este motivo, recalcan la importancia de seguir una dieta variada. Además, la OCU ha solicitado aumentar el número de controles de este contaminante en los alimentos.
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