Parados con más de 50 años: el nuevo perfil del usuario de comedores sociales que ya supera al extranjero

Enrique tiene 60 años. Era restaurador hasta la llegada de la crisis. Con ella, se quedó en la calle y empezó a ir a un comedor social de Valencia, algo que nunca habría imaginado.

"Es una pelota que cada día se va haciendo más grande. Estoy agradecido de que, en un momento en el que lo necesitaba, me acogieron", afirma Enrique. Español de más 55 años, es el perfil de riesgo de pobreza que más ha aumentado en España. Esto es, personas trabajadoras, con amplia experencia, que han agotado su prestación por desempleo y no consiguen trabajo.

"Un trabajo, ser autosuficiente y poder integrarte de nuevo en la sociedad", demanda Enrique para volver a la normalidad. Como él, también está Carmen, que ha vivido hasta 16 años en la calle. "Me han pasado muchas cosas y calamidades", cuenta la usuaria del comedor social.

Ahora, espera recibir una pensión no contributiva. Mientras ha encontrado el apoyo que necesita en 'Casa Caridad', donde dan comida caliente a 300 personas a diario. Cada vez más españoles tienen la necesidad de acudir a estos lugares.

"Es el primer año de los últimos 15 que los españoles superan al número de extranjeros", explica el vicepresidente de 'Casa Caridad', Luis Miralles, sobre la asistencia de personas a estos comedores.

Según la comparativa, si en 2006 los españoles no llegaban a la mitad, quedándose en el 46%, ahora, una década más tarde, la superan: hasta un 51%. Un dato preocupante que se suma a otro en la actualidad. Sólo en España, más de dos millones de personas acuden cada día a comedores como este.