Cuarentena por el macrobrote
La policía interviene de madrugada el hotel de Mallorca con 250 jóvenes en cuarentena por fiestas y actos vandálicos
Los turistas de hoteles colindantes denunciaron que se escuchaba música a alto volumen y que diversos jóvenes estaban lanzando objetos a la vía pública. Además, estaba subiendo alcohol con sábanas por los balcones.
La Policía Local de Palma de Mallorca ha tenido que intervenir en el Hotel Palma Bellver, donde guardan cuarentena más de 250 jóvenes por el macrobrote generado tras un viaje de fin de curso, a causa de las numerosas quejas de particulares y clientes del hotel colindante.
Según han denunciado algunos de los turistas, la madrugada ha estado marcada por los ruidos procedentes del Hotel Palma Bellver, donde se podía escuchar música a alto volumen y numerosos gritos. Además, los denunciantes también alegaban que desde el hotel se estaban lanzando objetos a la vía pública.
Los agentes pudieron comprobar los hechos y, al preguntar al personal de seguridad del hotel, éste le manifestó su preocupación por la posibilidad de que un bar colindante estuviera proporcionando bebidas alcohólicas a los jóvenes confinados, muchos de ellos menores, mediante cubos que lograban ascender hasta la habitación con sábanas.
En un comunicado, la Policía Local ha remarcado que, a pesar de que los jóvenes hicieron caso omiso a las reprimendas de los agentes de seguridad del establecimiento turístico, sí obedecieron las órdenes de los cuerpos de seguridad.
Un 25% de positivos
Uno de cada cuatro, el 25,7 %, de los 249 jóvenes peninsulares aislados en un "hotel puente" de Palma, por su relación con el macrobrote que ha causado un millar de afectados en ocho comunidades por viajes de estudios a Mallorca, ha dado positivo en COVID-19 en las pruebas PCR que se les han realizado.
De los 64 que han dado positivo, 14 están ingresados en el Hospital Son Espases con síntomas leves y 50 permanecen en el hotel Palma Bellver, donde la Conselleria balear de Salud ha habilitado un dispositivo especial para atenderles, con personal sanitario y de intendencia y psicólogos.
Además del teléfono de atención para los estudiantes y sus padres o tutores (900 700 222) habilitado desde ayer, el Govern ha lanzado este martes un mensaje de tranquilidad para los progenitores, por medio del portavoz del Comité Autonómico de Enfermedades Infecciosas de Baleares, Javier Arranz, que ha asegurado que los jóvenes en cuarentena "están bien atendidos y controlados médicamente".
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"Los padres deben estar tranquilos, sus hijos están bien cuidados", ha dicho Arranz, que admite que, aunque "nadie quiere estar aislado y cuarentenado", esta medida se aplica desde hace meses para frenar la pandemia. "La cuarentena no ha dejado de existir por ir de vacaciones", ha argumentado. Ha recalcado que están hospedados en un "muy buen alojamiento" de cuatro estrellas, con una "garantía médica de una buena atención".
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