TRAS LA NEGATIVA DE ITALIA Y MALTA
Proactiva Open Arms prevé que su embarcación con 60 migrantes a bordo llegue al puerto de Barcelona el próximo miércoles
El barco de Open Arms viaja rumbo al litoral catalán con 60 migrantes rescatados a bordo. Tiene el combustible justo y los ánimos están bajos. Entre los pasajeros, de 14 nacionalidades distintas, algunos confiesan que prefieren morir a volver a Libia. Hay dos menores que viajan solos. El barco llegará el miércoles, previsiblemente, los activistas aseguran que están doblemente contentos por la rápida respuesta de España.
A través de su cuenta de Twitter, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, agradeció al Gobierno que permitiera a esta embarcación atracar en Barcelona, elogió la labor de la ONG y aseguró que la capital catalana espera "con los brazos abiertos" a los migrantes.
De hecho, antes de conocerse la decisión del Gobierno, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ya había asegurado que Barcelona estaba "preparada para recibir" a la embarcación Open Arms "y a todas las personas rescatadas". Tres administraciones, el Ayuntamiento de Barcelona, la Generalitat catalana y el Gobierno, trabajarán ahora de forma conjunta para organizar la llegada de los rescatados y se aplicarán los protocolos establecidos.
El rescate de los migrantes se produjo en aguas internacionales frente a Libia, cuando desde la embarcación de Proactiva se avistó una balsa neumática en la que viajaban hacinados numerosos migrantes, entre ellos algunos niños.
En total son 60 personas: ocho palestinos, ocho de Sudán del Sur, tres de Mali, cinco sirios, uno de Burkina Faso, otro de Costa de Marfil, cuatro eritreos, ocho egipcios, tres de República Centroafricana, dos de Camerún, dos etíopes, seis libios, ocho de Bangladesh y un guineano.
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Estaba acusado de un asesinato cometido en 2009 en Talavera de la Reina (Toledo). Tenía pendiente cumplir una condena de 15 años. Se ocultaba junto a su mujer entre grandes medidas de contravigilancia.