¿Por qué sigue siendo necesario el Día para la Eliminación de la Discriminación Racial?

Un 21 de marzo, pero en 1960, la Policía abrió fuego contra una manifestación pacífica contra las leyes del 'apartheid' en Shapeville (Sudáfrica), tras lo cual fallecieron un total de 69 personas. Desde este momento, cada 21 de marzo se celebra el Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, con la finalidad de recordar la lucha necesaria de los gobiernos contra la discriminación en sus calles e instituciones. Tan solo en España los delitos de odio relacionados con la raza de la víctima o su origen étnico representan casi un 40% del total de este tipo de delitos, una cifra preocupante que pone en valor la necesidad de este homenaje.

El tema del Día Internacional de 2023 para combatir con urgencia el racismo y la discriminación racial está dentro de lo que la comunidad internacional acordó hace 75 años en la Declaración Universal de los Derechos Humanos. A través de este documento se estipuló que todas las personas, independientemente de su raza, color u origen tienen los mismo derechos y libertades y que, además trabajarían para erradicar el racismo y la discriminación a nivel global. De esta forma, no solo es un día para conmemorar la lucha contra el racismo sino también la victoria que supuso la supresión de leyes discriminatorias y las nuevas políticas antirracistas.

En España la mayoría de los delitos de odio son discriminatorios contra colectivos de color, de otra raza u etnia; un total del 35,46% de toda la muestra de delitos son causados por racismo y xenofobia, siguiéndole la homofobia y la discriminación por ideología, según muestra un informe del Ministerio del Interior. Esto demuestra la urgencia que tienen las nuevas políticas contra el racismo en Europa con su Plan antirracista 2020-2025 que tiene por objetivo poner como prioridad la lucha contra el racismo en la agenda europea.

Síntomas de la discriminación racial: colegios, primer empleo y vivienda

La discriminación no solo tiene una faceta sino varias. Existe racismo y xenofobia en las calles, en las instituciones, en los colegios e incluso en el mercado laboral. Según el último informe del Ministerio de Inclusión, los hijos de españoles tienen un 36% más de posibilidades de continuar con los procesos de selección simplemente por su procedencia, mientras que los hijos de migrantes marroquíes tienen un 50% de probabilidad de ser rechazados; los hijos de peruanos, un 30% y los de chinos, un 31,7%, muestras representativas de la dificultad que supone para este colectivo para entrar a trabajar en España.

Por otra parte, en los colegios, los hijos de migrantes tienen mayores problemas para acceder a la educación pública: tan solo un 10% de los estudiantes eran de origen inmigrante en el curso académico 2021/2022, lo que representa tan solo el 15% de la población total de extranjeros. Además, la tasa de escolarización de este colectivo es del 49%, frente a la de los españoles, que es del 73%. No obstante, atendiendo a su evolución el indicador muestra una tendencia al alza en ambos grupos, siendo la de los extranjeros la que va creciendo a mayor velocidad desde 2013.

Con respecto a la vivienda, la discriminación racial también se ceba con este colectivo; según el Ministerio de Igualdad la vivienda es uno de los ámbitos donde más se produce discriminación. El 23% de las personas encuestadas han sufrido discriminación en el acceso a la vivienda por su grupo étnico en los últimos cinco años, en el caso de Europa. Según los resultados recogidos en la encuesta, a un 17,7% se les negó ver la vivienda para alquilar o comprar, a un 20,8% no quisieron alquilársela y a un 20,1% le pusieron problemas o más requisitos que al resto.

Claves del Plan de Acción Antirracista europeo 2020-2025

Además de las medidas jurídicas contra la discriminación, el Plan Antirracista también recoge políticas para paliar las desigualdades en el acceso al empleo, la educación, la atención sanitaria y a la vivienda a través de actuaciones políticas:

• En el empleo se adopta la Agenda de Capacidades Europea en la que se pide a los programas de educación y formación profesional que sean inclusivos para los grupos vulnerables, incluidas las personas de origen racial o étnico minoritario mostrando especial atención en los jóvenes de este colectivo.
• En educación se realizan programas de educación inclusiva para la que los profesores reciben formación para trabajar con niños de distintos orígenes constituyendo espacios seguros sin discriminación ni racismo. Además, el programa Erasmus+ financia proyectos que contribuyan a la integración de personas pertenecientes a minorías étnicas o raciales.
• En salud, como respuesta a las desigualdades existentes por origen racial o étnico tras el Covid-19, se centran las medidas en el paciente, incluyendo las necesidades específicas de cada persona según origen racial o étnico.
• En vivienda, la Unión Europea responsabiliza a las autoridades nacionales y locales para prevenir la segregación social e informa sobre la existencia de los fondos de la política de cohesión para apoyar acciones de viviendas no segregadas.