La pena más alta por odio

Sentencia ejemplar contra el racismo en Melilla: siete condenados a prisión por incitar a la violencia contra menores extranjeros

Con mensajes violentos y racistas instaban a través de un grupo de Facebook multitudinario a agredir a menores migrantes en Melilla. La condena de cárcel más alta por un caso de odio es un aviso: amenazar y estigmatizar a estos niños puede conducir directamente a prisión.

Ante unos niños solos, en un país extranjero, los siete condenados por delitos de odio proponían esto.. "Eso se solucionaba dando un día de ciudad sin ley. Cómo ya la es a diario para esta bazofia. Yo le daba un día de vacaciones a la justicia y dejaba al pueblo actuar libremente. Y en 24 horas se quedaba Melilla limpita como la patena".

incitaba a agredirles o darles palizas en grupos organizados de adultos..... "...o salimos a dar palos nosotros o no vamos a arreglar nada..." Página 4. Último parrafo. “Tenemos que organizarnos y hacer patrullas por barrios. Ya lo hicimos una vez y limpiar las calles de esta gentuza..." Si voy en coche, atropello al que sea..." Lo hacían en un grupo de facebook... multitudinario en el contexto de Melilla.. total de javier moreno y

La Audiencia Provincial de Málaga ha condenado a siete personas a prisión por un delito de odio contra menores migrantes en Melilla. Se trata de una sentencia pionera, con la mayor pena de cárcel que se haya impuesto en España hasta ahora por "proyectar comentarios totalmente inductores al odio, desprecio y discriminación contra un colectivo social existente en la Ciudad de Melilla, los menores de edad no acompañados".

A cinco de los acusados se les ha condenado a dos años y seis meses de cárcel, y a los otros dos a un año por delito de odio, no por denuncias simples, y esto es clave.

En la sentencia, que ha avanzado la 'Cadena SER', se deja claro que fomentar un clima de rechazo contra este colectivo es un delito de odio, con el agravante de haberlo hecho a través de redes sociales.

Y es que estos adultos incitaban a agredir a los menores no acompañados o a darles palizas en grupos organizados. "O salimos a dar palos nosotros o no vamos a arreglar nada". "Tenemos que organizarnos y hacer patrullas por barrios. Ya lo hicimos una vez y limpiar las calles de esta gentuza...". "Si voy en coche, atropello al que sea...".

Esta son algunas de las amenazas que podían leerse en un multitudinario grupo de Facebook en el contexto de Melilla. En dicho grupo había unas 14.000 personas, que constituyen el 20% de la población de la ciudad.

Por eso algunas algunas asociaciones no lo dejaron pasar en 2017 y ahora, esta sentencia supone un éxito gigante para ellos. Es un aviso, amenazar y estigmatizar a estos niños puede conducir directamente a prisión.

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