Suicidio de la trabajadora de Iveco
Trabajo concluye que la difusión de los vídeos sexuales de la trabajadora de Iveco no provocó su suicidio
El informe de la Inspección de Trabajo ha determinado que a la víctima "no le afectó" el hecho de que varios de sus compañeros difundieran y visualizaran las imágenes que se estaban difundiendo.
El informe de la Inspección de Trabajo ha concluido que la difusión de los vídeos sexuales de una trabajadora de Iveco no provocó su suicidio, sino que "su preocupación se centraba en el ámbito familiar", en concreto, "en su marido".
Según recoge 'El Periódico', la Inspección de Trabajo y Seguridad Social ha archivado el caso determinando que "el problema de la trabajadora se encontraba en el entorno personal" y que a la víctima "no le afectó la visualización del vídeo por parte de sus compañeros en cuanto a su contenido", sino que le preocupó que estas imágenes llegaran "a su entorno familiar y más concretamente a su marido".
En cuanto a los dispositivos utilizados, la inspección ha resuelto que la empresa no tuvo responsabilidad porque "la difusión del vídeo se hizo a través de los teléfonos privados de los propios trabajadores", que además tienen prohibido el uso de sus móviles durante la jornada laboral, salvo casos urgentes.
Precisamente, hace un mes el Juzgado de Instrucción número 5 de Alcalá de Henares archivó las diligencias abiertas para investigar el origen de la difusión de un vídeo sexual en mayo de 2019 por el que una madre de 32 años trabajadora de la fábrica de Iveco de San Fernando de Henares se quitó la vida. El archivo se dio por "falta de autor conocido" del delito de descubrimiento y revelación de secretos, según han informado fuentes jurídicas.
La jueza Ana María Gallegos se hizo cargo del caso tras recibir el atestado policial del suicidio. En un principio, se investigó si una antigua pareja de la fallecida o ella misma, por error, habrían difundido por primera vez las imágenes.
Además, los agentes al cargo de la investigación analizaron el vídeo para comprobar quiénes lo habían compartido y si la mujer pudo haber sufrido acoso por parte de personas de la empresa en la que trabajaba.
Según explicó CGT Iveco cuando se conoció la noticia, los vídeos fueron grabados hace seis años y, al ser compartidos entre los compañeros, la afectada se dirigió a Recursos Humanos de la empresa para explicar la situación; este departamento le aconsejó denunciarlos hechos pero ella rehusó hacerlo.