Las imágenes aéreas que muestran la magnitud de la tragedia tras la DANA

Un paisaje apocalíptico es lo que se ve desde el aire en una zona de Aldaya. Aunque no lo parezca, un escenario marrón lleno de coches volcados y vegetación arrancada es realmente la entrada de un centro comercial en el que quedaron atrapadas decenas de personas durante la DANA.

La fuerza del agua ha provocado movimientos de tierra, levantando carreteras, como en La Alcudia y arrastrado barcazas desde el mar tierra adentro. El nivel de los ríos ha bajado en algunas zonas dejando al descubierto esqueletos de puentes afectados. Estructuras bajo las que hoy se mezclan vegetación y coches destrozados.

La DGT supervisa desde sus helicópteros las kilométricas colas de vehículos varados que no pudieron continuar un trayecto que por el camino se tragó a varios de ellos. No son pocos los campos que se han convertido en océanos echando a perder la cosecha de toda la temporada.

En las zonas pobladas, los coches siguen apilados en mitad de las calles junto a los muebles llenos de barro que los vecinos sacan a las puertas de sus casas.

Los servicios de emergencia acompañan con cámaras térmicas a quienes trabajan bajo sus pies, buscan supervivientes abriendo puertas coche por coche, en los tejados, con lanchas y revisando hasta los establos.

También desde el aire, rescates uno detrás de otro, muchos de personas con movilidad reducida y de avanzada edad que habían quedado atrapadas a su suerte.

Desde el espacio, las imágenes de la NASA muestran como zonas cercanas al Mediterráneo han quedado totalmente anegadas. Una huella dantesca a vista de pájaro que muestra la furia de la naturaleza. Es la devastación de una DANA que será difícil de olvidar.