Dio positivo en alcohol

Tres años de prisión para el legionario que atropelló mortalmente a una niña de cinco años en Almería

Ocurrió hace más de dos años y, desde entonces, la vida de los padres de Leire quedó destrozada. Su hija murió atropellada por un legionario que cuadruplicaba la tasa de alcohol y superaba el límite de velocidad.

El hombre que atropelló mortalmente a Leire en julio de 2021 se ha sentado en el banquillo de los acusados. Cabizbajo y con mascarilla, ha reconocido que circulaba ebrio cuando se produjo el siniestro y ha aceptado una pena de tres años de cárcel.

Este jueves, los padres de la niña han estado muy cerca de él y a la salida del juicio, entre lágrimas, han contado la rabia que han sentido. "Ver a ese tío y no poder hacer nada. Te sientes impotente. Estaba sentado delante de nosotros y no podíamos reclamarle nada", han explicado David y Rocío, los padres de Leire.

La familia de la niña pedía para él nueve años de cárcel. Pero, tras un acuerdo, ha sido condenado a tres años de prisión por un delito de conducción temeraria y otro de homicidio por imprudencia grave. Además, ha aceptado otros seis años de privación del derecho a conducir vehículos de motor, pero para la familia esta pena es insuficiente.

"Si la Justicia estuviera bien hecha esta persona, como poco, estaría comiéndose nueve años de cárcel, no tres. Lo aceptamos para asegurarnos de que entre en la cárcel", ha destacado David. "Es una pena insuficiente para el resarcimiento de estos padres", ha añadido Juan Manuel Medina, el abogado de la familia.

Durante el juicio el acusado ha pedido perdón, pero los padres de Leire han asegurado que no se creen sus palabras. "Ni nos lo creemos, ni lo aceptamos. Es un perdón falso, con lágrimas de cocodrilo", sostienen. También han señalado que en ningún momento les ha mirado a la cara.

La familia quería un juicio con jurado popular por homicidio doloso por unos hechos que ocurrieron el 6 de julio de 2021, en una calle de Roquetas de Mar, en Almería. La niña de cinco años caminaba de la mano de su madre y se disponía a cruzar un paso de peatones cuando un coche, a gran velocidad, la arrolló. Leire murió en el acto por traumatismo craneoencefálico severo.

El vehículo lo conducía un legionario que iba a 83 kilómetros por hora en una vía de 50 y que, además, cuadruplicaba la tasa de alcohol. El legionario tendrá que pagar además a la familia una indemnización de 215.000 euros.

laSexta/ Sociedad/ laSexta