Levantan el confinamiento de las 3.000 personas afectadas por las explosiones de una cementera en La Palma

Las autoridades han decretado el fin del confinamiento para unas 3.000 personas de El Paso y Los Llanos de Aridane, tras terminar la emisión de gases derivados de la combustión de naves industriales al entrar en contacto con la colada de lava.

El confinamiento fue ordenado este lunes en aplicación del Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Riesgo Volcánico en la Comunidad Autónoma de Canarias (Pevolca), que activó un nivel 2 de emergencia tras constatar que el flujo de magma había provocado la combustión en una fábrica de cementos del polígono industrial del Callejón de la Gata, en Los Llanos de Aridane.

Una vez finalizado el riesgo en la zona al cesar la emisión de gases derivados de la combustión de las naves industriales y analizados los datos de calidad del aire, se ha acordado decretar el término del confinamiento de la población.

Esta medida afectó al espacio comprendido entre el cruce de Camino Cruz Chica con la carretera LP-2, siguiendo al oeste hasta el cruce con Nicolás Brito País, continuando este camino hasta la circunvalación y por ésta hasta la rotonda de Hoyas Hondas. A partir de este punto se incluyó toda la zona afectada por el incendio del mes de agosto hasta el campo de fútbol de El Paso, incluyendo la zona comprendida al oeste de la LP-3 hasta la rotonda del Sombrero.

La alcaldesa de Los Llanos de Aridane, Noelia García, ha explicado que "aún quedan edificaciones" cercanas a la cementera hacia las que está avanzando la lava. En una entrevista a Al Rojo Vivo ha detallado que en el barrio de la Laguna, "en la zona más próxima al polígono, hay una zona desalojada desde hace semanas y en los últimos días se ha intensificado la retirada de enseres". La otra zona de La Laguna, por el momento, no se ha evacuado, aunque "muchos vecinos ya se han ido llevando cosas" de sus viviendas.

No se descarta que se cree otra fajana

En rueda de prensa, María José Blanco, directora del Instituto Geográfico Nacional en Canarias, ha explicado que "desde el desbordamiento de ayer del lago de lava el flujo principal discurre por el franco norte hacia el mar, bajando por la parte norte de las coladas previas siguiendo trayectorias hacia el oeste". "La distancia de la colada al mar es de 300 metros por lo que puede llegar a formar otro delta o fajana en la playa", ha indicado.

Además, según el Pevolca, la altura de columnas y cenizas de gases alcanza los 4.000 metros. Además, el viento y la inmersión térmica están teniendo consecuencias desfavorables respecto a la calidad del aire, ya que "unido a la orografía circundante impide la dispersión de contaminantes durante la madrugada y primeras horas de la mañana", según ha explicado María José Blanco.