Una reconstrucción lenta

La vida en la zona cero de la DANA, dos meses después: "No he podido pararme a llorar"

Cansancio Los vecinos de Paiporta y de Catarroja no terminan de ver la luz al final del túnel. Aún siguen sacando agua. Aún hay zonas llenas de barro. Aún se notan los efectos de la DANA de finales de octubre.

Han pasado dos meses desde la DANA que arrasó Valencia. Que arrasó varias localidades, varios pueblos, de la provincia valenciana. De unas lluvias, de una riada, que han hecho que muchos lo pierdan todo. Que han dejado más de 220 muertos. Que, a día de hoy, siguen dejándose notar en la llamada 'zona cero' de la tragedia.

En, por ejemplo, Paiporta, tal y como narra Luisa, una vecina del pueblo: "Un valle de lágrimas. Gracias a Dios mi familia está bien, pero si mi hermano hubiera estado en casa... y mis sobrinas casi pierden la vida. Tuvieron que sacarlas por la ventana".

"He llorado mucho. Mucho. Y de ver cómo la gente te abrazaba. Cómo me decían 'señora, que la veo muy mal", cuenta Luisa sobre la DANA.

"No nos han pagado nada, nadie"

La reconstrucción del pueblo, lenta y dolorosa. Y no es en el único lugar, porque en Catarroja la situación es similar. Siguen sacando agua. Sigue habiendo zonas llenas de barro.

"No he podido pararme a hablar. No he podido pararme a llorar. No he podido pararme a nada. No podía. Era mi supervivencia, y como la mía la de mucha gente", afirma Mónica, vecina de Catarroja.

Las ayudas, mientras, no llegan, como cuenta Nuria: "No nos han pagado absolutamente nada, nadie. No vemos el día de volvernos a nuestra casa a vivir".