Joaquim Bosch analiza la reforma del PSOE de limitar la acusación popular: "Hay elementos razonables y otros bastante discutibles"

Este viernes, el PSOE registrado en el Congreso de los Diputados una proposición orgánica para acabar con las "acciones judiciales abusivas" tales como acotar las acusaciones populares, la "supresión del delito de ofensas contra los sentimientos religiosos" o la "abstención y recusación de jueces por declaraciones de contenido político".

Joaquim Bosch, magistrado y miembro de Juezas y Jueces para la Democracia (JJpD) asegura en Al Rojo Vivo que ha leído el texto íntegro de la propuesta y ésta tiene "elementos razonables y otros bastante más discutibles".

Por un lado, destaca el magistrado que "hay bastante consenso en el ámbito jurídico y político en los últimos años, en que debe limitarse la actuación de sindicatos y partidos políticos como acusación popular porque hay una frecuente instrumentalización de la actividad judicial desde todos los ámbitos. Es decir, se utiliza el proceso penal muy a menudo como un especio para sacar titulares, montar ruedas de prensa a las puertas de los palacios de Justifica y para favorecer estrategias partidistas".

El problema, sin embargo, desataca Bosch, es que "la proposición de ley va más allá" y plantea por un lado, explica el experto, acotar los ámbitos donde puede ejercer la acusación popular, esto es, se aparta por ejemplo, la acusación popular de delitos sexuales o delitos de violencia machista; y por toro lado, restringir sus actuaciones, es decir, en todos los delitos se restringe mucho su actuación, hasta el extremo de que no se puede actuar en toda la fase de instrucción".

De este modo, resumen Bosch, "la propuesta tal como está planteada, limitaría la acción ciudadana como acusación popular y la podría vaciar hasta el extremo de que puede generar dudas razonables de constitucionalidad". En el vídeo, podemos ver al completo su análisis.