Al inicio de la investigación
El organista 'Joaquín el teclas', una limpiadora y el responsable del Botafumeiro: los sospechosos por el robo del Códice Calixtino
"Empezamos a recibir un montón de denuncias hacia personas del interior de la catedral", recuerda el juez Vázquez Taín en el programa 'Anatomía de...', que ha analizado el robo del Códice Calixtino en 2011.
Una vez que fueron descartados varios turistas, visitantes e invitados del deán de la catedral, la investigación policial se centró en los trabajadores del templo o "perímetro medieval". Esa fue la denominación ideada por los policías ya que "decían que entrar en la catedral era como hacerlo en la Edad Media", recuerda el reportero de sucesos Luis Rendueles.
La lista estaba conformada por unas cuarenta personas -canónigos y empleados-. Los investigadores comenzaron a identificarlos. Según destaca Rebeca Lorenzo, miembro de la Brigada de Patrimonio, "todos eran sospechosos". "Aparecieron unas 12 personas o '12 negritos', como en las novelas de Agatha Christie. Se hizo una lista en la que se reflejaron sus cuentas corrientes, si tenían antecedentes o cuentas pendientes con Hacienda, si tenían familiares que habían estado en prisión...", destaca Rendueles.
Entre las personas que formaban parte de la lista había una encargada de la limpieza de la catedral, el responsable del Botafumeiro, el guardés nocturno, electricistas y un organista conocido como 'Joaquín el teclas'.
Más Noticias
Miki Nadal desvela a quién le recuerda Valeria Ros bailando: "A Lydia Lozano" ¿Sabías que las ratas están incluidas en la ley de Bienestar Animal? Te lo cuenta el veterinario Víctor Algra Así reaccionó Dioni (Camela) tras ver a Conchita en TCMS imitándolo: "Flipó, me dijo que podía reemplazarle en su gira" El cuñado de Manuela Chavero espera que al acusado le "caiga lo que queremos todos, la cadena perpetua revisable" ¿Dónde está Cristina Pardo? La razón por la que no presenta hoy Más Vale Tarde con Iñaki López
La Policía ya tenía la primera lista de sospechosos. El robo del Códice amenazaba con destapar las luchas de poder y secretos de la catedral, que no eran pocos. "Tanto el deán como los canónigos iban notando la presión policial, que estábamos investigándolos a ellos y a su entorno, y eso les hacía tambalearse porque estaban acostumbrados a lavar sus trapos sucios dentro de los muros de la catedral", asegura Lorenzo.
El bebé terminó muriendo de hambre
Así intentaron los marineros del Alakrana salvar a un bebé y a una niña a la que los piratas intentaron violar en otro barco
El Alakrana no fue el único barco secuestrado por los piratas somalíes: otro llevaba cinco meses y medio secuestrado y en su interior había hasta una niña a la que los piratas violaban y un bebé, que terminó muriendo de hambre.